Sábado 9 de septiembre de 2017. El diario ‘El Mundo’ en su suplemento ‘La Otra Crónica’ dedica una página completa a Andrea Levy. Lo hace para desvelar que la diputada del Partido Popular tiene una nueva pareja: Nacho Vegas, el cantautor ‘indie’ al que el rotativo de Unidad Editorial presenta como el último “chico malo” que le gusta a la vicesecretaria de Estudios y Programas del Partido Popular. 

Dos días después, un rumor empieza a sacudir las redacciones: Pablo Iglesias habría puesto fin a su relación sentimental con su compañera de filas Irene Montero. En apenas unas horas, pocos son los medios de comunicación que no se hacen eco de la ruptura y empiezan a informar que el líder de la formación morada podría estar saliendo en la actualidad con la presentadora de televisión Paula Vázquez.

El de Levy y el de Iglesias son los últimos ejemplos que demuestran que la vida privada de los políticos interesa a los medios de comunicación. ¿Pero el derecho a estar informado prima sobre la privacidad de los políticos? Y sobre todo, ¿este fenómeno de informar sobre la intimidad de los representantes públicos es nuevo, o se remonta al pasado?

[[{"fid":"59472","view_mode":"default","fields":{},"type":"media","attributes":{"alt":"'El Mundo' se hace eco del beso entre Pablo Iglesias e Irene Montero. Una imagen conseguida por 'OK Diario'","title":"'El Mundo' se hace eco del beso entre Pablo Iglesias e Irene Montero. Una imagen conseguida por 'OK Diario'","class":"img-responsive media-element file-default"}}]]

'El Mundo' se hace eco del beso entre Pablo Iglesias e Irene Montero. Una imagen conseguida por 'OK Diario'

Derecho a estar informado
Sobre el debate entre periodismo y vida privada, la BBC es tajante en su libro de estilo: “El interés del público y su derecho a estar informado prima sobre el derecho a la privacidad de las figuras públicas, especialmente cuando se trata de políticos o personas en puestos de poder”. 

Una reflexión a la que ya llegaron en 1992 ‘Press Complaints y Comissions’, órgano independiente que se encarga de dilucidar en qué casos la prensa transgrede el código de conducta británico: “La vida privada de los políticos es de interés público cuando interfiere en su actividad política”, manifestaron hace ya 25 años.

Los estadounidenses también entendieron que tienen derecho a saber lo que hacen sus gobernantes y que ese derecho es mayor al de privacidad de su gobernador. Tanto es así que en 2009 el periódico ‘The New York Times’ ganó varios premios ‘Pulitzer’ por su investigación sobre las relaciones extramatrimoniales que mantuvo el entonces gobernador del estado de Nueva York, Eliot Spitzer.

Un fenómeno ya habitual en España   
Respecto al interés que los políticos suscitan en la prensa rosa, desde luego tampoco se puede hablar de un fenómeno nuevo. Los tres ex presidentes del Gobierno, Felipe González, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero, ya protagonizaron en su día múltiples portadas del corazón.

 

Lo cierto es que poco a poco, España se ha ido habituando a que los representantes públicos compartan espacio con las ‘celebrities’ en la prensa del corazón.

Aunque eso sí, las primeras instantáneas sobre los responsables políticos del Estado español fueron publicadas por medios internacionales. En 1995 la revista ‘Novella 2000’ publicó las fotografías del rey Juan Carlos desnudo a bordo del yate Fortuna. Las instantáneas fueron realizadas cinco años antes por varias agencias españolas pero no encontraron mercado en España, lo que no impidió que tiempo después se publicasen en Italia.

La fotografía del primer político español en la playa también se publicó fuera de nuestra fronteras. Fue en 2008 cuando el medio italiano ‘Il Corriere della Sera’ sacó a la luz las imágenes en las que Aznar lucía abdominales. Algo que una década después ya es habitual en la prensa del corazón de nuestro país. Son informaciones que no entienden de partidos políticos. Sin ir más lejos, el pasado verano, el exsecretario general del PSOE protagonizaba la portada de la revista ‘Pronto’ bajo el siguiente titular: “Pedro Sánchez, pillado en la playa divirtiéndose con su mujer y sus hijas”.

El desnudo del rey Juan Carlos y Pedro Sánchez en la playa, en la prensa del corazón.

Informaciones que la prensa generalista en España ha ido incluyendo de forma paulatina entre sus contenidos. Y es que no solo la revista ‘Hola’ ha informado de la relación que Felipe González mantiene con Mar García Vaquero, sino que los periódicos tradicionales también se han hecho eco del nuevo romance del expresidente del Gobierno.

No es de extrañar, por tanto, que diferentes medios de comunicación difundiesen hace unos meses las imágenes en las que Pablo Iglesias besaba a Irene Montero. Y es que el fenómeno de informar sobre la vida privada de Levy -o de cualquier otro representante público en España-, no es algo nuevo.