Este viernes 1 de julio la Dirección General de Tráfico (DGT) ha puesto en marcha la primera fase de la operación especial del verano en las carreteras, donde se esperan un total de 84 millones de viajes hasta agosto, con un dispositivo especial de vigilancia. La directora de la DGT, María Seguí, anunció que este año desplegarían sesenta nuevos radares ligeros para los motoristas de la Guardia Civil, más vigilancia de los helicópteros Pegasus en autovías y autopistas y también como novedad a señalización fija de 300 tramos peligrosos de vías convencionales. Además, se llevarán a cabo tres campañas intensivas durante los meses estivales: una para vigilar las condiciones de los vehículos y otra para aumentar los controles de alcohol y drogas en coincidencia con el puente del 15 de agosto.

Los paños calientes de la DGT no pueden ocultar el mal inicio de año
"Espero que aunque este año todavía no vamos muy adelantados en la reducción de los accidentes este verano podamos conseguir reducirlos todavía más, aunque el objetivo de la DGT es que haya cero accidentes", ha asegurado este viernes Ángel de Blas, subdirector de la DGT. Los rodeos de su discurso aludiendo a que no van "adelantados" en la reducción no pueden ocultar que de momento lo que hay en los primeros seis meses del 2016 es un importante incremento de los fallecidos en accidentes en carretera respecto al mismo período un año antes. 
 

El repunte de las víctimas mortales se produce además después de varios años de estancamiento en los que la DGT no consigue que baje el número de fallecidos o lo hace de manera testimonial. Y eso que el propio organismo, que depende del Ministerio de Interior de Jorge Fernández Díaz, está reconociendo con motivo del décimo aniversario de la entrada en vigor con el Gobierno socialista del carné por puntos, que fue una medida efectiva. "Estimamos que el permiso por puntos ha contribuido a mejorar la seguridad vial tanto en la concienciación de los ciudadanos como en la reducción de accidentes que es al fin y al cabo uno de los objetivos más importantes de la DGT. El permiso por puntos es y ha sido positivo y hay que continuar con él mejorándolo si es posible y adaptando algún otro tipo de media que podamos consensuar con los ciudadanos", admite.
 

"La gestión de la DGT y de Interior ha sido mediocre"
El problema, según algunas asociaciones de víctimas de accidentes y de automovilistas, es que han faltado acciones ambiciosas desde entonces. Francisco Canes valoraba así los datos de fallecidos en 2015 cuando salieron a la luz a principios de este año: "La reducción es mínima. La gestión de la DGT y del Ministerio del Interior ha sido mediocre. [...] La realidad es que no se ha hecho lo suficiente. La seguridad vial sigue siendo un problema de ámbito nacional que ha dejado de recibir la importancia que se merece. El Ministerio del Interior ha tirado por tierra los logros conseguidos en los últimos años. Es inadmisible que Tráfico siga presumiendo de estar entre los mejores de Europa cuando el número de personas que pierden la vida en las carreteras sigue siendo tan importante". 

Canes apuntaba varios motivos de insatisfacción con el Gobierno: "La modificación del Reglamento de Circulación no ha llegado a aprobarse en esta legislatura, no se ha hecho la inversión necesaria en la mejora de las carreteras ni se ha dado el impulso necesario al carnet por puntos. Es dramático que la seguridad vial sólo importe cuando se producen un gran accidente múltiple o una gran tragedia. Más de mil personas pierdan la vida todos los años en accidentes de tráfico. No hay mayor tragedia que esa".