La infanta Cristina ha dejado su trabajo en La Caixa después de 25 años trabajando en la Obra Social de la entidad. Un cuarto de siglo de labor al que se puso fin el pasado 12 de diciembre después de un año de duras negociaciones, según ha adelantado El Confidencial. El patronato de la Fundación decidió dar de baja a la hermana del Rey, aunque sin fecha de salida oficial.

Cristina de Borbón se podrá centrar en la Fundación Aga Khan, donde se desenvuelve laboralmente en el departamento de Acción Social Internacional. La sede de la organización se encuentra en Lisboa, por lo que la infanta tan sólo tendrá que viajar a España por motivos de índole personal y familiar, para visitar a su marido en la prisión de Bieva, por ejemplo.

Un cuarto de siglo en el banco

Aún falta solventar algunos de los flecos para la rescisión de la infanta Cristina. El patronato, conformado por 14 patronos entre los que destaca César Alierta o Javier Solana. Por unanimidad, todos ellos fueron parte del encuentro en el que se estableció el fin del vínculo con la hermana del Rey.

Licenciada en Ciencias Políticas, Cristina comenzó su relación laboral con La Caixa en el año 1993, formando parte del equipo del área internacional de la Obra Social. En 1997, la hermana de Felipe VI contrajo matrimonio con Iñaki Urdangarín, eligiendo Barcelona como residencia.

Sin embargo, después de que el caso Noos estallara, Cristina de Borbón solicitó una baja laboral. Muchos accionistas de la entidad solicitaron su salida de la Obra Social, aunque las altas instancias de La Caixa la defendieron y protegieron. De Barcelona pasó a Suiza y sus visitas a la sede de la entidad en la Ciudad Condal se redujeron ostensiblemente hasta que, finalmente, los patronos decidieron prescindir de sus servicios.