La Conferencia Episcopal Española (CEE) ha elegido para dirigir la comisión que combatirá la pederastia dentro de la Iglesia al obispo de Astorga, Juan Antonio Menéndez Fernández, que encubrió y silenció a un sacerdote acusado de abusos a menores.

El pasado mes de septiembre, una de esas víctimas del sacerdote de La Bañeza denunció, en una entrevista en la SER, que le llegaron a "ofrecer 50.000 euros por su silencio". Sin embargo, el obispo de Astorga permitió que se le hiciera un homenaje de despedida al cura pederasta.

Juan Antonio Menéndez Fernández será quien dirija una comisión, integrada por diez expertos, que actualizará los protocolos de actuación de la Iglesia en España para responder a los casos de abusos a menores desde el punto de vista jurídico y canónico y se compromete a responder "a cada queja de abuso contra el personal de la Iglesia". La normativa actual, de 2010, protege más al sacerdote pederasta que a sus víctimas.

El miembro del Opus Dei que integra la comisión

El nuevo protocolo deberá adaptarse al modelo creado por la Comisión para la Protección de Menores del Vaticano, con el objetivo de ayudar a las Conferencias Episcopales y a las congregaciones religiosas a doisponder de procedimientos para la protección de las víctimas de abusos sexuales. El próximo 21 de febrero, el Papa Francisco ha convocado en la Santa Sede a las máximas autoridades eclesiásticas a un encuentro en el que se tratará esta problemática.

La comisión, formada por juristas de la Junta de la Episcopal de Asuntos Jurídicos, el Servicio Jurídico Civil, el Tribunal de la Rota de la Nunciatura Apostólica, el Servicio Jurídico de CONFER y la vicesecretaría para Asuntos Generales, tiene entre sus miembros al responsable del Servicio Jurídico Civil de la CEE, Silverio Nieto, del colegio del Opus Dei Gaztelueta, quien fue acusado por las víctimas "de engaño".