Un estudio publicado en la revista científica Nature Communications ha revelado que los cigarrillos electrónicos pueden conllevar diferentes riesgos nocivos para la salud. Según la mencionada investigación, el uso de este tipo de dispositivos, también llamados vapeadores o vapes, tiene posibilidades de causar efectos negativos para los seres humanos.

Los autores del informe han utilizado ratones para el análisis de los efectos en tiempo real provocados por los aerosoles de cigarrillos electrónicos en las propiedades eléctricas del corazón. El personal de investigación de la Universidad de Louisville, en Estados Unidos, han realizado varios experimentos en los que comprobaron los efectos de los aerosoles de cinco tipos diferentes de estos dispositivos, el humo principal de dos de ellos y la acroleína, un gas que producen tanto los electrónicos como los tradicionales.

La cardióloga Regina Dalmau del Hospital Universitario La Paz, en Madrid, ha explicado que el objetivo de este estudio consiste en analizar el efecto de los diversos aerosoles sobre las propiedades electrofisiológicas de la célula miocárdica, lo que ha verificado evidencias previas por las que se adjudicaba un potencial efecto sobre la regulación autonómica a estos aerosoles.

Efectos negativos de los cigarrillos electrónicos

La citada investigación ha concluido que el uso de los cigarrillos electrónicos puede ocasionar arritmias ventriculares potencialmente malignas. Y no solo eso, sino que el equipo científico que ha redactado el informe ha añadido más efectos negativos: alteración de la repolarización ventricular y de la frecuencia cardíaca generadas mediante la modulación del sistema nervioso autónomo durante la exposición.

“Nuestros hallazgos demuestran que la exposición a corto plazo a los cigarrillos electrónicos puede desestabilizar el ritmo cardíaco a través de sustancias químicas específicas dentro de los líquidos electrónicos”, ha evidenciado el profesor de la Universidad de Louisville y director del estudio, Alex P. Carll, quien ha explicado más detalles de la investigación: “Estos hallazgos sugieren que el uso de cigarrillos electrónicos con ciertos sabores o vehículos solventes puede alterar la conducción eléctrica del corazón y provocar arritmias. Estos efectos podrían aumentar el riesgo de fibrilación auricular o ventricular y paro cardíaco repentino”.

Este estudio aporta luz a una creciente evidencia acerca de la potencial toxicidad y los impactos negativos en la salud por parte de los cigarrillos electrónicos. En esta misma línea, otro de los componentes de la referida investigación científica, Aruni Bhatnagar, ha afirmado que estos “datos son importantes” porque traen nuevas demostraciones sobre la relación entre el consumo de este tipo de dispositivos y su efecto en los ritmos cardíacos normales: “Es algo que no sabíamos antes”. No obstante, el miembro del equipo investigador se ha mostrado muy preocupado por “el rápido crecimiento del uso de cigarrillos electrónicos, particularmente entre los jóvenes”.

En cuanto al estudio, este ha concluido que la naturaleza y la magnitud de estas respuestas varían en función de las sustancias químicas contenidas en el cigarrillo electrónico, como los sabores, la nicotina o los disolventes. Por citar uno de sus ejemplos, los líquidos con sabor a mentol han demostrado que afectan a la conducción auricular, los impulsos eléctricos a través de las aurículas del corazón.