El Gobierno de la Comunidad de Madrid sigue generando polémica ante la falta de rastreadores en la región y la poca voluntad de gastar dinero en la contratación de los especialistas a pesar de que el número de contagiados sigue aumentando de forma preocupante.

De los 400 rastreadores que el vicepresidente de la región, Ignacio Aguado, aseguró que se contratarían el pasado mes de mayo, solamente han firmado a 380 en tres meses. Una cifra demasiado baja y que muestra el poco interés del Ejecutivo regional para aumentar el número de especialistas.

La Universidad Complutense de Madrid anunció en un mensaje en Twitter hace unos días que la Comunidad de Madrid estaba buscando voluntarios para ser rastreadores. Un tuit muy polémico por el gran número de quejas que recibió el centro universitario y el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso.

Un enfermero y trabajador del Servicio Madrileño de Salud (SERMAS), Alejandro Sanz, ha revelado en redes sociales cuál es la respuesta que la Complutense envía a todos aquellos que quieren trabajar como rastreadores.

La universidad asegura que "si su ofrecimiento es para un contrato laboral, le informo de que la Consejería de Sanidad cubre las plazas a través de las Oficinas de Empleo Público", algo que descarta cualquier tipo de contratación de rastreadores.

En la búsqueda por conseguir voluntarios que trabajen gratuitamente para la Dirección General de Salud Pública de la Comunidad de Madrid hay que cumplir los siguientes requisitos: "el envío de un breve curriculum con su formación" y saber cual es "la disponibilidad en número de horas o días" durante los próximos meses.

Tras compartir el mensaje que recibió por parte del departamento público sanitario, Alejandro ha criticado la actitud del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso. "Esto es lo que quiere la Comunidad de Madrid, trabajo gratuito. Después de meses mintiendo de manera deliberada sobre sus rastreadores y de gastar millones de euros en Ifema y el hospital de pandemias", ha reprochado el especialista.

Una falta de reconocimiento por parte del Gobierno regional que, una vez más, no valora el tremendo esfuerzo que han hecho y hacen los sanitarios para evitar que las personas se contagien y terminen falleciendo a causa del coronavirus. 

Aunque Isabel Díaz Ayuso no quiere gastar dinero en la contratación de rastreadores, sí decidió aportar un gasto importante con la creación del nuevo Hospital de Emergencias de Valdebebas. Actualmente se estima que costará unos 50 millones de euros, a lo que hay que unir el gasto del Hospital de Ifema, que costó 60 millones de euros. En total, 110 millones de euros con los que se podrían haber contratado rastreadores suficientes como para evitar una segunda oleada en la región.