La violencia de género, aquella que afecta a las mujeres por el mero hecho de serlo, constituye un atentado contra la integridad, la dignidad y la libertad de las mujeres. Se entiende por violencia de género cualquier acto violento o de agresión, así como las amenazas y coacciones, basados en la situación de desigualdad respecto a los hombres.

Este tipo de violencia supone “un gravísimo problema de salud pública”, tal como lo calificó la ministra de Igualdad, Irene Montero. La gran magnitud de este problema es lo que ha llevado a que desde las instituciones se busque ponerle fin, además de proteger a las víctimas. Recientemente se ha publicado la Macroencuesta de Violencia contra la Mujer de 2019, la sexta que se ha realizado en España, y en ella se dejaron ver datos alarmantes y muy preocupantes.

El 57,3% de las mujeres de 16 años o más que residen en España ha sufrido violencia de género en alguna de sus formas (física, sexual, económica, psicológica o acoso sexual) en algún momento de sus vidas. En este estudio se indica que una de cada dos mujeres han sufrido violencia machista y, concretamente, el 40,4% (8.240.537) de las mujeres con más de 16 años han sufrido acoso sexual.

Respecto al stalking o acoso reiterado, la Macroencuesta señala que el 15,2% (3.095.357) de mujeres lo han sufrido en algún momento de sus vidas, el 3% (613.917) en los últimos doce meses. Tras recibir estos datos en una respuesta parlamentaria, el senador socialista Miguel Ángel Heredia ha destacado en declaraciones a ElPlural.com el compromiso del Gobierno en “la lucha contra la lacra machista” y señala que considera fundamental que todas las instituciones dispongan de una hoja de ruta, de una Estrategia Nacional, para dar una respuesta eficaz e integrada frente a la violencia contra las mujeres.

“La elaboración por parte del Ministerio de Igualdad  de una Nueva Estrategia Nacional para Combatir las Violencias Machistas (2021-2025), para poder garantizar el derecho de todas las mujeres a vivir una vida libre de violencias, situando en ella la agenda política y de la formulación de sus políticas públicas, es una buena noticia”, explica Heredia. Y zanja que estos datos de la Macroencuesta “desmienten a quienes defienden que no existe este tipo de violencia, así como a los que pretender invisibilizar a las víctimas”.

Refuerzo de la lucha policial

Durante los siete años de mandato de Mariano Rajoy, los efectivos policiales contra la violencia de género sufrieron marcados recortes. Desde 2011 a 2018, los efectivos de la Policía Nacional para este servicio fueron recortados un 19%. Con la llegada del Gobierno de coalición la tendencia se ha invertido y en dos años se ha incrementado la plantilla policial dedicada a este ámbito un 8,5%.

En lo que se refiere a la Guardia Civil, en siete años se incrementó la plantilla en 21 agentes, pasando de 611 en 2011 a 632 en 2018. Mientras, desde 2018 han aumentado en 96, llegando a alcanzar los 728 especializados en la lucha contra la violencia de género.