Podría ser una trama de algún episodio policíaco televisivo, pero no. El actor de El Comisario y de La que se avecina (entre otros) Luis Lorenzo ha sido detenido por el presunto envenamiento de una tía de su mujer en edad avanzada para heredar. Según avanza El Confidencial, el intérprete junto a su pareja invitaron a la anciana a su domicilio.

El crimen presuntamente urdido y perpetrado por Lorenzo y su mujer ha trascendido este viernes, aunque el hermano de Isabel presentó una denuncia por desaparición a principios del año pasado. Al comprobar que la mujer no regresaba a su casa en Asturias, José se puso en lo peor y auguró que algo malo ocurría, por lo que decidió personarse en un cuartel de la Guardia Civil.

La Guardia Civil de Asturias transfirió el caso a Madrid, por cuestiones de proximidad, dado que la residencia del intérprete y su pareja está ubicada en Rivas. Los agentes de la Benemérita se personaron en el domicilio de Lorenzo y este les abrió la puerta en un aparente estado de tranquilidad. Preguntaron por la anciana y reconoció que Isabel vivía con ellos, El actor explicó que no estaba desaparecida.

La conversación transcurrió con absoluta normalidad, hasta que los dos agentes le pidieron por favor pasar al interior de la vivienda y comprobar el estado de Isabel. Sin embargo, con rotundidad, Lorenzo espetó que a su casa “solo se entra con una orden judicial”. Los dos guardias civiles, desamparados en esta ocasión por la ley, tuvieron que marcharse sin comprobar el estado de la anciana.

Durante su estancia en casa del actor, el médico visitó a Isabel y le diagnosticó demencia porque, al parecer, no regía bien. Antes de esta ocasión, ya había estado en casa del matrimonio durante largos periodos de tiempo. De hecho, cada vez que viajaba a Madrid actuaba como si padeciera de verdad dicha enfermedad, aunque recuperaba la normalidad en cuanto regresaba a Asturias.

Sin embargo, en junio, tres meses después de ‘desaparecer’ a ojos de su hermano, Isabel falleció en el domicilio de Luis Lorenzo. El matrimonio decidió entonces enviar el cuerpo de la mujer a Asturias para que se le diese sepultura en su tierra. Ambos remitieron un documento de un médico que certificaba que la muerte fue por causas naturales, debido a su demencia y otras dolencias que padecía.

No obstante, al hermano de Isabel no le encajaba todo lo acontecido. José siempre había visto a su hermana en perfecto estado de revista, sin ningún tipo de demencia, y denunció ante el Instituto Armado que no era un caso normal. De hecho, deslizó ante el cuerpo que podría haber sido asesinada y persistió hasta que la Justicia ordenó que se le practicase la autopsia al cuerpo.

Efectivamente, José estaba en lo cierto. Los forenses hallaron trazas de dos metales pesados en altas dosis que provocaron la muerte de su hermana Isabel. La anciana murió envenenada, activando los resortes policiales para esclarecer la autoría de los hechos. Las investigaciones descubrieron que la mujer se gastó 30.000 euros durante su estancia en la casa de Luis Lorenzo.

Los agentes averiguaron que el intérprete no trabajaba en aquel momento y sospecharon que Isabel se convirtiera en su banco particular. Unos meses antes de su muerte, según las pesquisas del Instituto Armado, la mujer finiquitó su testamento, legándoselo todo a su sobrina Arancha, la mujer de Lorenzo.

Este mismo jueves, el magistrado que instruye la causa ordenó el registro del domicilio de la pareja para localizar la procedencia de los metales con los que envenenaron a Isabel. Un día después, ambos han acudido al juzgado de guardia de Arganda del Rey a primera hora para tomarles declaración.