El convento de Sansepolcro, en la provincia italiana de Arezzo y región de Toscana, echa el cierre tras difundirse que la madre superiora, María Teresa Saccente, de 40 años, mantenía una relación de amor con un hombre. 

La superiora habría decidido terminar su relación ante su fuerte vocación religiosa, pero esto no le ha evitado que tuviera que abandonar sus hábitos y que se optara por cerrar el convento, según una información del diario La Repubblica, recogida por ABC. "La gente llora por el cierre del monasterio y yo también lloro. Lo que estoy sufriendo me marcará para toda la vida y será difícil que en el futuro yo disponga todavía ganas de tener relación con la Iglesia", afirmó.

Misterio sobre la relación

El obispo de Arezzo, Ricardo Fontana, ha admitido que la madre superiora del convento de Sansepolcro ha tenido que dejar el velo y los votos religiosos. "Yo no tengo nada que ver, ha intervenido la Santa Sede y todo se acabó", ha afirmado antes de señalar que se trata de "un caso muy doloroso para las personas que están implicadas".

Según explicó el obispo, el cierre del convento fue inevitable porque solo quedaba una monja de 80 años y dos novicias, que, no podrían mantener por sí solas la gestión del convento.

Sobre la historia de amor de la madre superiora, al parecer un velo de misterio cubre toda la verdad, ya que Maria Teresa Saccente ha declarado que "han querido hacer ver que todo ha sido una historia de amor. Dejemos que lo digan. El caso es mucho más complicado de lo que parece".

Un sitio de acogida y celebraciones

El alcalde del pueblo, de 16.000 habitantes, Mauro Cornioli, ha dicho que "se echará en falta este lugar espiritual y su espacio de acogida".  La gestión del Monasterio de los Padres Capuchinos, construido en el año 1611, había sido concedido a las monjas benedictinas de la Congregación Olivetana, después de muchos años de abandono.

El convento era un centro espiritual y de acogida, con 19 camas y varios bungalós distribuidos entre olivos alrededor del monasterio. El lugar estaba preparado para la celebración de bodas, bautizos y comuniones.