Fundación Aquae presenta una nueva entrega de AquaeXplore para explicar cómo se transforman las aguas residuales en las plantas de depuración con el fin de reutilizarlas o dispersarlas sin riesgos en la Naturaleza. En la actualidad, más del 80% de estas aguas grises se vierte al entorno sin ningún tipo de tratamiento, lo que provoca que el 25% de la población -1.800 millones de personas- acceda a fuentes de agua contaminadas.

AquaeXplore es un proyecto de divulgación diseñado para ayudar a explicar el mundo del agua de forma interactiva, con vídeos en 3D, infografías, mapas, gráficos, imágenes y textos, elaborados por ingenieros de Canales y Puertos, Marítimos o Aeronáuticos y expertos medioambientales, como la autora de este último capítulo, Encarnación Rodríguez Hurtado, catedrática de Tecnología Ambiental de la Universidad Politécnica de Madrid.

En esta nueva entrega se explica qué son y cómo funcionan las estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR), adentrando al lector en las instalaciones de una planta, a través de una visita virtual. Asimismo, se ilustra, paso a paso, el proceso de depuración y las posibles funciones de estas aguas depuradas, que suelen emplearse en usos urbanos (limpieza de calles, riego de espacios públicos, sanitarios o bomberos), usos industriales (refrigeración o alimentación de calderas), uso agrícola y ganadero (riego de cultivos, semilleros o limpieza de ganado), recarga de acuíferos, riego de campos de golf, o bien son devueltas a mares y ríos sin riesgo de contaminar la flora y fauna acuática.

Por último, nos muestra algunas EDAR de envergadura, como la de Atotonilco (Hidalgo, México), la mayor depuradora del mundo que, cuando finalicen sus obras, permitirá dar servicio a doce millones de habitantes.

En 2030 se espera que la demanda mundial de agua crezca un 50 por ciento y la mayor parte de esta demanda será en ciudades, por lo que es imprescindible un nuevo enfoque para el tratamiento de las aguas residuales. Por un lado, se vierte a los ecosistemas agua contaminada, que daña el medioambiente y la salud de millones de personas, provocando enfermedades como el cólera, la disentería, la fiebre tifoidea o la poliomielitis; y, por otro lado, se pierde la oportunidad de reutilizar esta agua en diferentes procesos, como regadíos o generación de energía, que están utilizando agua potable, un recurso que como sabemos, escasea”, explica Mikel de Pablo, responsable de Proyectos de Fundación Aquae.  

Objetivo 6.3 de los ODS: minimizar las aguas grises

La meta 6.3 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Organización de Naciones Unidas (ONU), con los que se alinean los proyectos y actividades de Fundación Aquae, es reducir a la mitad el porcentaje de aguas residuales que no reciben tratamiento y aumentar su reciclado y reutilización en condiciones de seguridad a nivel mundial para 2030. En 2017, la ONU centró el Día Mundial del Agua en las aguas residuales, bajo el lema ‘Aguas residuales, ¿por qué desperdiciar agua?’, con el objetivo de concienciar sobre la importancia de reducir la generación de aguas residuales y mejorar su tratamiento.

Según señala De Pablo, “en España solo se reutiliza el 13% del agua depurada. ¿Por qué no considerar las aguas residuales como un recurso en vez de una “carga” de la que hay que deshacerse? Y al utilizar términos como reciclaje y reutilización hablamos de economía circular, un modelo clave para el desarrollo sostenible del planeta”.

Aquaexplore es una experiencia interactiva para conocer aspectos singulares del mundo del agua que se enmarca dentro de los proyectos “’Wiki’ de Fundación Aquae, pensados para difundir el conocimiento en temáticas relacionadas con el agua, el medioambiente y la sostenibilidad.

En anteriores entregas, AquaeXplore nos enseñó los secretos que ocultan los áridos suelos de Marte; cómo funciona la revolucionaria tecnología ice pigging para limpiar y mantener las cañerías mediante la inyección de hielo granizado; o la presa de las Tres Gargantas, la mayor del mundo, situada en el curso del río Yangtsé, en China.