Hace más de dos años que el Congreso de los Diputados dio luz verde a la conocida como ley de la eutanasia, pero esta batalla ideológica vuelve a la Cámara Baja esta semana. De la mano de Vox, el pleno volverá a acoger una norma que rodea a la posibilidad de acudir a esta práctica para poner fin a la vida de forma voluntaria. Así, este martes el hemiciclo tendrá que debatir y votar la toma en consideración de una Proposición de Ley presentada por la formación de extrema derecha sobre cuidados paliativos para "garantizar el derecho de las personas" a acceder a unos servicios "avanzados y de calidad" en los últimos momentos. Un intento que presentaron el pasado mes de octubre frente a "la cultura de la muerte de la izquierda radical" para hacer frente a la legislación y que justifican en el propio articulado de la Constitución. Con todo, los de Santiago Abascal tienen muy difícil sacar adelante este texto, al menos tal cual está, ya que las formaciones apoyan de forma mayoritaria la ley orgánica en vigor, que ya el Constitucional ha avalado recientemente en contra de los recursos de los ultras.

Una PL de cuidados paliativos

El debate sobre la eutanasia vuelve al Congreso, aunque no de la misma manera. Esta semana el Pleno tiene previsto iniciar su actividad este martes con el debate y votación de la toma en consideración de una proposición de ley (PL) orgánica del grupo parlamentario Vox sobre cuidados paliativos. Un texto que tiene como objetivo "garantizar el derecho de las personas a acceder a unos cuidados paliativos avanzados y de calidad cuando sean necesarios" -tal y como se establece en el artículo 1- y que estos "sean proporcionados por personal sanitario debidamente cualificado". Unas medidas que están pensadas para todos aquellos "pacientes que se encuentren en el proceso final de su vida o que afronten decisiones relacionadas con dicho proceso o a sus representantes legales" y también a "familiares", al "personal sanitario" que los atiende, los "centros sanitarios, públicos y privados" y las "entidades aseguradoras o mutualidades que presten sus servicios en el territorio nacional", tal y como reza el documento.

El partido de extrema derecha registró en la Cámara Baja una PL en octubre de 2022 -más de un año después de la entrada en vigor de la norma de la eutanasia- para hacer frente a "la cultura de la muerte de una izquierda cada vez más radical" y "alejada de los problemas reales de los españoles". Así lo esgrimió su portavoz parlamentario, Iván Espinosa de los Monteros, quien dio cuenta de una "hoja de ruta de la vida; de la esperanza; del verdadero y necesario bienestar social" que se plasma en una ley de cuidados paliativos "para que todos los enfermos, personas mayores, hombres, mujeres y niños en el proceso final de la vida reciban el cuidado que se merecen". La propuesta, a grandes rasgos, incluye unidades de cuidados paliativos en todas las ciudades así como profesionales formados en esta especialidad. "Vox reclama algo tan sencillo como la disponibilidad de los recursos y algo tan sensato como la accesibilidad, es decir, que todo el mundo pueda llegar a ella", aseguró entonces.

Vox vs. eutanasia

Sin embargo, la intención velada de los de Santiago Abascal es derogar la ley Orgánica 3/2021, de 24 de marzo, de regulación de la eutanasia que la Cámara baja aprobó en marzo del 2021. De hecho, los ultras se acogen a la propia Constitución, que recoge en el artículo 15 que "todos tienen derecho a la vida y a la integridad física y moral, sin que, en ningún caso, puedan ser sometidos a tortura ni a penas o tratos inhumanos o degradantes". "Este precepto supone, como en otros derechos fundamentales, el establecimiento de una doble exigencia a los poderes públicos: por un lado, las Administraciones deben abstenerse de lesionarlo; por otro, se encuentran vinculadas por la obligación positiva de garantizar su eficacia a través de un adecuado sistema legal de protección", aseguran. Según explica Vox en la exposición de motivos de la PL, la vida es un derecho natural que "emana de la esencia de las cosas con independencia de que la regulación jurídico-positiva los reconozca y garantice o no", por lo que entienden que la eutanasia ha acabado con "el paradigma del derecho fundamental a la vida".

"El ordenamiento jurídico se ha visto perturbado en los últimos tiempos por la aprobación de una Ley Orgánica que, amparada en razones tan deletéreas como tratarse de una supuesta "demanda sostenida de la sociedad actual" o en consideraciones de tipo emotivista -como que debe ponerse fin a las situaciones "que conmueven a la opinión pública"-, ha truncado el paradigma de protección del derecho fundamental a la vida (que debe informar todo el ordenamiento jurídico en tanto que conditio sine qua non para el ejercicio de cualesquiera demás derechos) con el fin de justificar una supuesta "muerte digna", insisten, por lo que, a su juicio, esto choca directamente con la norma, por lo que han incluido una disposición derogatoria única para acabar con todas las normativas "de igual rango o inferior que contravengan" la ley propuesta. Es decir, y "en concreto", la regulación de la eutanasia, que tiene unos requisitos específicos. Pero esta finalidad se pone muy complicada para los ultras, que han rechazado responder a las preguntas de ElPlural.com al respecto de este articulado.

Especialidad de cuidados paliativos

En cuanto a las medidas contenidas, la propuesta de Vox incide en la necesidad de formar a los profesionales médicos al tiempo que apuestan por crear una especialidad en Medicina. Sobre la formación, los ultras piden en el artículo 4 del texto la "incorporación de los cuidados paliativos en los programas curriculares de las carreras relacionadas con la medicina y las ciencias de la salud" así como "la inclusión de los cuidados paliativos en los programas de formación continuada a lo largo del desempeño de la carrera profesional". "Se adecuarán los contenidos y la formación al tipo y grado de vulnerabilidad a las capacidades y al grado de dependencia de los paciente", añaden. Mientras en el artículo 5 piden al Gobierno que establezca "en el plazo de seis meses" desde la entrada en vigor de esta norma "el título de médico especialista en cuidados paliativos" conforme a la Ley 44/2003 de 21 de noviembre, de ordenación de las profesiones sanitarias. Un punto que también extienden a los que hayan ejercido en cuidados paliativos durante mínimo cuatro años, quienes tendrán que acreditar la formación "avanzada nivel máster".

Cuidados en casa y permisos

Asimismo, el partido contempla la ampliación de estos cuidados en el hogar. En el artículo 12, bajo el titulo Derecho al acompañamiento del entorno del paciente, la formación aboga por cuatro puntos que inciden en la necesidad de ello. Así, aseguran que "los pacientes que permanezcan ingresados en un centro o institución sanitarios durante el proceso final de su vida tienen derecho a que se les permita el acompañamiento de su entorno familiar, afectivo y social sin limitación, a salvo de lo que exija la organización y funcionamiento del referido centro o institución" asi como que "toda persona que se encuentre en el proceso final de su vida tendrá derecho a recibir, conforme a sus convicciones y sus creencias, la asistencia espiritual o religiosa que solicite". Para ello, también contemplan unos permisos laborales retribuidos para los familiares con el objetivo de que puedan acompañar al paciente en su propia casa o un derecho a tener una habitación individual en el caso de estar en un hospital.