El concejal de Vox en el Ayuntamiento de Getafe, José Manuel Fernández Testa, ha señalado a las mujeres como las culpables de que el tiktoker Naim Darrechi engañara a mujeres para eyacular dentro sin usar preservativo.

Así lo ha dicho en el Pleno del Ayuntamiento de Getafe durante su turno de palabra."¿Insinua usted que el embarazo no deseado también es culpa del hombre?", comenzaba diciendo.

"Claro, si ese hombre que usted pone como ejemplo engaña a las mujeres, se pone o no preservativo, digo yo que son ellas las que se dejan engañar", añadía.

Unas palabras que han sido denunciadas por la portavoz de Podemos Getafe y segunda tenienta de alcaldesa y concejala de Feminismos y Agenda 2030, Alba Leo, en su cuenta de Twitter.

"El concejal de Vox acaba de decir en el Pleno de Getafe que la culpa de que el tiktoker Naim engañara a mujeres para eyacular dentro sin condón es culpa de las mujeres por dejarse engañar. Culpa a la víctima de un abuso sexual es MUY grave y no puede quedar así", tuiteaba.

El tiktoker podría acabar en prisión

Naim Darrechi, el ‘tiktoker’ mallorquín que acumula más de 26 millones de seguidores en la red social, alardeó en una entrevista con Mostopapi de haber tenido sexo sin condón y sin el previo consentimiento de sus parejas en repetidas ocasiones: "No puedo, me cuesta mucho con condón. Entonces nunca lo utilizo, hasta que un día dije: 'Tío, es raro que no haya dejado embarazada a ninguna así, tantos años, así que voy a empezar a acabar dentro siempre, sin ningún tipo de problema” defendía. Al ser preguntado por lo que les decía a las mujeres con las que mantenía relaciones sexuales sobre no utilizar preservativo, respondía: "Tú tranquila que yo me he operado para no tener hijos”.

El pasado lunes 12 de julio, Irene Montero, ministra de Igualdad, puso el caso “en conocimiento de la Fiscalía”. Además, gracias a una de las últimas leyes aprobadas por el Gobierno de España, la Ley del solo sí es sí, estos actos ya no serían considerados como abuso sexual, sino como agresión, al no tener el consentimiento explícito de la mujer.

Actualmente, si hay violencia o intimidación hacia una persona en términos sexuales se considera una agresión. Si no hay violencia o intimidación, sería un abuso y cualquier acto que no cuente con el consentimiento de la otra parte sería constitutivo de delito. Por tanto, la agresión sexual se ejerce contra el sujeto pasivo y tal violencia, según recoge el artículo 178 del Código Penal, está penada con prisión de uno a cinco años. Si la agresión incluye el componente carnal, la pena de cárcel podría ascender a 12 años, ya que supone la "introducción de miembros corporales" en la otra persona sin su consentimiento.