Políticos, artistas y famosos de todo tipo van saliendo a dar explicaciones sobre su aparición en los 'papeles de Panamá' como propietarios y gestores de firmas opacas. Uno de los primeros nombres que trascendió fue el del escritor peruano Mario Vargas Llosa, que hoy ha hecho declaraciones a la prensa estadounidense tras ser galardonado por la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos en Washington. 

Habla de "firma durmiente"
El Nobel restó importancia a su aparición y culpó de ello a sus asesores y a la prensa.
"Apareció mi nombre en una firma que nunca existió, en una firma que llaman durmiente. [...] Los abogados que se ocupan de mis derechos de autor probablemente reservaron eso (la firma Talome Services Corp junto a su exmujer Patricia Llosa) por cinco semanas y hubo una contraorden y esa supuesta firma que nunca existió desapareció", explicó. El literato fue accionista durante un mes de una sociedad con ventajas fiscales radicada en las Islas Vírgenes Británicas, según las filtraciones que en España han sido difundidas por El Confidencial y laSexta. 

Según su versión, Vargas Llosa se desvinculó de esta sociedad antes de ganar el Nobel de Literatura en 2010 y no ha tenido relación alguna con el despacho de abogados de Mossack Fonseca, facilitador de la apertura de esas empresas opacas. La empresa Talome Services la compró el matrimonio Llosa al bufete especializado de Mossack Fonseca a través de un intermediario, Dave Marriner, directivo de la firma holandesa Pan-Invest Management, con sedes en Chipre y Luxemburgo. El literato admitió hoy que en el pasado ha "tratado de explicar por qué existen esos paraísos fiscales", pero que eso "es distinto de justificar" su existencia. A juicio de Vargas Llosa, todo ha sido un "pequeño malentendido" que "ha explotado el periodismo amarillo".