Iñaki Urdangarin ha admitido que su empresa Aizoon, cuya titularidad compartía con la Infanta Cristina, cometió irregularidades para “tener ventajas fiscales”. El exduque de Palma comparece este miércoles, por segunda vez, después del pasado viernes, en el juicio del caso Nóos.


Los Tejeiro
Urdangarin ha vuelto a descargar la responsabilidad en el asesor fiscal Miguel Tejeiro, a desvincular a la Infanta de la trama empresarial tejida alrededor de Nóos y a eludir responsabilidades.

Lo hacía por consejo de los Tejeiro. "Seguía las instrucciones de Miguel y Marco Tejeiro[tesorero de Nóos, cuñado de Diego Torres]", ha dicho Urdangarin, que ha admimtido que los empleados no trabajaban en el objeto social”.


Admite ingresos públicos
Urdangarin ha admitido que cobró "710.000 euros más IVA" a través de Nóos por los eventos Valencia Summit e Illes Balears Fórum; adjudicaciones de los gobiernos populares de Francisco Camps y de Jaume Matas.

Como hizo el viernes pasado, el exduque de Palma se ha escudado en evasivas para desmarcarse de la trama Nóos con frases como “lo desconozco” o “no lo sé”. "Es importante saber que en las empresas existe división de funciones y ésta no era mi función", ha dicho Urdangarin, al responder a las preguntas del fiscal Pedro Horrach.

Ni un paso sin consultarlo con Zarzuela
Sobre el papel de la Infanta Cristina en Nóos, Urdangarin ha respondido que su función era “simplemente conformar la junta directiva". El exduque alude a sus vínculos con la Casa Real al asegurar que “no daba un paso en mi vida sin consultarlo con García Revenga [secretario de las infantas]”.

Sobre las declaraciones a Hacienda de la Infanta, Urdangarin ha declarado que “siempre ha estado al cargo de ello el señor Federico Rubio, es un asesor que venía por parte de la Casa del Rey”.