Coincidiendo con el inicio del escrutinio en Galicia, los ultras regresan a la calle de Ferraz para rezar el rosario. En torno a un centenar de personas se han congregado a las puertas de la sede nacional del Partido Socialista para encomendarse a los poderes divinos y que no se registre un vuelco electoral en los comicios autonómicos. Se han reunido en los mismos puntos donde se convocaban las manifestaciones diarias contra la ley de amnistía y los pactos del Gobierno con las formaciones independentistas, frente a una iglesia cercana al cuartel general del PSOE.

Alrededor de un centenar de personas se han congregado en los aledaños de la sede nacional del Partido Socialista, entre las calles de Ferraz y Marqués de Urquijo, en Madrid. Una nueva convocatoria similar a las manifestaciones diarias durante los meses de noviembre y diciembre, para protestar contra la ley de amnistía y los acuerdos entre el PSOE y los partidos independentistas. No obstante, en esta ocasión coincide con el recuento electoral de los comicios autonómicos en Galicia.

Este grupo de personas se ha congregado frente a una iglesia cercana a la sede socialista, mismo punto donde se convocaban las concentraciones diarias, que fueron objeto de denuncia por parte del PSOE. No obstante, a diferencia de aquellas jornadas, la situación es de absoluta normalidad en las inmediaciones del cuartel general de los socialistas, desde donde altos cargos del partido están siguiendo la evolución del escrutinio. Frente a la sede, varios furgones de la Policía custodian el lugar, aunque está abierto el tráfico para vehículos y viandantes.

La vicesecretaria general, María Jesús Montero y el secretario de Organización, Santos Cerdán, el secretario de Acción Electoral, Javier Izquierdo y la portavoz, Esther Peña, además de otros miembros de la Ejecutiva Federal están en Ferraz para hacer el seguimiento del recuento, según han indicado fuentes de la dirección. Mientras tanto, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sigue el escrutinio desde el Palacio de la Moncloa.

El PSOE recurrirá el archivo contra los ultras

El Juzgado de Instrucción número 26 de Madrid archivó las actuaciones cometidas en la convocatoria ultra en Nochevieja, el 31 de diciembre, en la sede estatal del PSOE en Ferraz y que fueron denunciadas por el partido hace un mes atrás, ya que, entre otras cuestiones, se apaleó un muñeco que representa a Pedro Sánchez.

La jueza que instruye el caso sostiene que los hechos denunciados “no son constitutivos de infracción penal”, pese a que a lo largo de la sentencia se inscriben con detalle las proclamas que aquella noche se vertieron en contra de los socialistas, en especial, ante el muñeco que representaba al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y que colgaron de un semáforo. 

Según reza en el auto, ahora el PSOE tendrá un plazo de tres días para interponer un recurso de reforma y subsidiario de apelación; también un recurso de apelación directo en cinco días siguientes a la notificación judicial. Fuentes socialistas han señalado que recurrirán el archivo de la causa.

El PSOE presentó una denuncia ante la Fiscalía General del Estado a principios del mes de enero los hechos concurridos ante su sede nacional y en el marco de la convocatoria bautizada como ‘Nochevieja nacional’, protesta que siguió la estela de sus antecesoras congregando unas 300 personas para manifestarse en contra de los acuerdos alcanzados con fuerzas independentistas sobre la amnistía y en las negociaciones de la investidura de Sánchez. Los socialistas consideraron que las imágenes que trascendieron de este encuentro podrían ser constitutivas de un delito de incitación al odio, en concreto, cuando los manifestantes colgaron un muñeco de gran tamaño que representaba al presidente del Gobierno y que fue apaleado en repetidas ocasiones.

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