El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comparecido tras el Consejo de Ministros extraordinario que se ha celebrado con varios integrantes del Ejecutivo presentes vía videoconferencia (como es el caso de Pablo Iglesias e Irene Montero con motivo del positivo de la titular de Igualdad) para informar del paquete de medidas urgentes que es implementará para paliar las consecuencias de la crisis derivada del coronavirus.

Sánchez ha admitido que el país se enfrenta a “una emergencia sanitaria con múltiples consecuencias económicas y sociales” y ha hecho un llamamiento a la responsabilidad individual para, entre todos, superar la situación con el menos número de fallecimientos posible. Además, no ha descartado decretar el Estado de Alarma porque el escenario es cambiante: “Estamos hablando de una situación que no es estática, es dinámica. El Gobierno tomará las decisiones que deba tomar cuando haga falta”. La misma respuesta ante el hipotético cierre de la Comunidad de Madrid, principal foco del brote.

El paquete de medidas del Gobierno se centra en dos frentes, uno sanitario y otro económico. Así, se han desarrollado cuatro ejes de actuación: la protección hospitalaria de la actividad médica y hospitalaria; la atención directa a las familias, la protección del empleo, en especial a pymes y autónomos; y medidas de apoyo a los sectores del Transporte y el Turismo, que ya “acusan los efectos”.

En el apartado sanitario, el líder del ejecutivo ha comunicado que Sanidad ya ha comenzado a repartir 450.000 mascarillas, de las cuales 130.000 serán para la Comunidad de Madrid.

El Estado inyectará recursos económicos al sistema sanitario público a fin y efecto de garantizar el suministro de materiales y recursos humanos: “Vamos a transferir 2.800 millones a las comunidades autónomas para que puedan destinar los recursos que consideren necesarios” a la atención de los contagiados por coronavirus.

También “vamos a movilizar del orden de 1.000 millones del fondo de contingencia destinados a contenciones prioritarias” para  “garantizar el material necesario y medicamentos a precios asequibles”. En este punto, ha comunicado que el Ministerio de Consumo ha pedido a la CNMC que se mantenga vigilante para evitar abusos y que se ha centralizado la compra de materiales sanitarios.

Con respecto a la atención a las familias, el Gobierno destinará 25 millones para reforzar los servicios sociales. Se flexibilizarán las becas de comedor para “hacerlas efectivas incluso con los colegios cerrados” y se flexibilizarán los calendarios de acceso a la Universidad y a la Formación Profesional.

Sobre las ayudas a pymes y autónomos, Sánchez ha aprobado el aplazamiento de las deudas tributarias por un plazo de seis meses sin intereses. El montante total de la liquidez inyectada será de 14.000 millones.

El presidente ha destacado el papel “motor del sector turístico”, precisamente uno de los más azotados por la crisis del coronavirus. En consecuencia, el Estado ha dispuesto 400 millones. De entre las medidas, además, destaca que Renfe facilitará desde el 16 de marzo el cambio de billetes y la cancelación de los viajes del Imserso.

Pedro Sánchez ha anunciado que este no es más que el primer paquete de medidas, al tiempo que ha instado a la ciudadanía a extremar las precauciones y seguir en todo momento los consejos dados por los técnicos y los científicos: “Cada ciudadano debe cuidar de su salud. Debe cuidarse a sí mismo para cuidar a los demás. Protegerse a sí mismo para proteger a los demás. Estamos contribuyendo a la victoria del conjunto de país contra el virus.