El Partido Popular, Vox y Ciudadanos han usado a las víctimas de ETA en la segunda Sesión de Investidura de Pedro Sánchez, para tratar de quitar mérito a los acuerdos de los miembros socialistas.

Los partidos de derecha y ultraderecha han tratado de 'boicotear' la puesta en escena de EH Bilduutilizando a las víctimas del terriorismo de ETA, con insultos, gritos y tensión con el resto de parlamentarios de la izquierda.

Santiago Abascal, por ejemplo, ha abandonado la sesión mientras era el turno de palabra de la formación vasca. La derecho parece no saber, todavía, de la supresión de la banda terrorista durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

Algunas de esas víctimas, como, por ejemplo, María Jauregi, ha criticado duramente la posición y el uso que han tenido los partidos de derechas y ultraderecha, tratando de prohibir la libertad de expresión de los partidos políticos presentes en la cámara.

En redes sociales, María ha mandado un mensaje en redes sociales criticando tal postura y defendiendo de que su "aita estaría feliz" por ver que "ETA no existe" y "por la formación de un gobierno de izquierdas".

Tal es la importancia del escrito, que hasta el propio Pedro Sánchez ha querido compartir el escrito desde la tribuna del Congreso de los diputados. Emocionado ha mencionado las palabras de María para mostrar a la derecha que con las víctimas de ETA no se juega y menos en política.