El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, no descarta ser el candidato para encabezar las listas del PSOE para las elecciones europeas.

Así se ha visto tras su intervención, este lunes, en un desayuno informativo organizado por Europa Press. Preguntado por la posibilidad, el ministro no lo ha confirmado, pero ha asegurado que tampoco lo puede negar pues existe la posibilidad.

En los mentideros políticos es conocido el deseo de Borrell de continuar su carrera política en Europa, por lo que la hipótesis de que sería el candidato del PSOE, cobra fuerza.

Pese a ello, Borrell ha dejado claro este lunes que, a día de hoy, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no le ha hecho una oferta al respecto.

La economía europea se desacelera sin los estímulos del BCE

El ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Josep Borrell, ha afirmado que habrá que ver cómo hace la economía europea para "nadar sin flotador" ahora que "se van a acabar los estímulos del BCE".

"El crecimiento se está desacelerando, es normal que si los estímulos disminuyen el crecimiento también lo haga", ha dicho en un desayuno informativo de Europa Press, patrocioinado por Altadis, Endesa, Fujitsu, Fundación Ibercaja, KPMG, Suez y Telefónica.

El ministro ha señalado que tras unos ajustes largos y duros España está saliendo del túnel y creando empleo, pero en buena medida gracias a las "políticas expansivas del BCE" y a los "vientos de cola" que ahora pueden cambiar.

A su juicio, si las palabras que dijo en 2012 el gobernador del BCE, Mario Draghi -cuando dijo que haría lo necesario para salvar el euro- las hubiera dicho su antecesor, Jean-Claude Trichet, en 2010, Europa se habría ahorrado buena parte de la crisis.

Borrell ha repasado los retos a los que se enfrenta la UE, tanto internos (entre ellos el crecimiento económico) como externos, con un un entorno político cuyo centro se está desplazando al Indopacífico. En ese contexto, ha admitido, Europa necesita cohesión política y potencia económica si quiere mantener su influencia. El ministro acaba de volver de la India, un país que está a punto de adelantar a China en población y que crece a más de un 7% anual.

En el plano interno de la UE, ha dado por hecho que socialdemócratas y democristianos perderán la mayoría en el próximo Parlamento europeo y ha estimado que los "populistas" y "eurófobos" sumarán un 25 o un 30% de los escaños, "que no es poco", ha reconocido.

En este sentido, ha advertido de que Europa "no va a sobrevivir si no tiene una dimensión social, de protección". A su modo de ver, "la pareja francoalemana no procrea", en un momento en que la canciller alemana, Angela Merkel, está de retirada, y el presidente francés, Emmanuel Macron, tiene problemas políticos, ahora con las movilizaciones de los 'chalecos amarillos'.

En todo caso, ha apuntado también que el considerado como bloque populista en la UE tampoco es homogéneo, y ha puesto como ejemplo la inmigración, puesto que a Italia le vendría bien un sistema de cuotas que otros países, con la Hungría de Viktor Orban a la cabeza, rechazan.