Este martes hemos conocido los malos datos del paro en agosto: el número de parados sube a 47.047 personas respecto al mes anterior y se registra el mayor incremento en ese mes desde 2011 con un total de 3.182.068 parados.

Nada más conocer el dato, tanto el líder del PP, Pablo Casado; como el de Ciudadanos, Albert Rivera, han encendido una vez más el motor del miedo asegurando que la economía española peligra y que se puede empezar a vislumbrar la llegada de una nueva crisis.

Es cierto que el pasado viernes 31 de agosto se ganó el dudoso honor de ser el día en el que más empleo se destruyó en la historia de España, pero también lo es que el intento de acusar a Pedro Sánchez y su Ejecutivo de causar una nueva crisis es, cuanto menos, sorprendente.

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Hay que recordar que el Gobierno socialista de Sánchez acaba de cumplir algo más de dos meses en el poder y que es técnicamente imposible haber desarrollado políticas económicas que puedan influir en la economía a gran escala como para desembocar en una crisis. También hay que tener en cuenta que, de vivirse una nueva recesión económica, esta sería global, dependiente de la economía europea en general.

Sin embargo, Casado y Rivera parece que han encontrado un nuevo tema en el que competir. Tras las críticas por la exhumación de Franco, después de luchar día a día por ver quién defendía más la permanencia de los restos del dictador, llega la oportunidad de jugar la baza del miedo con la economía.

Varias personas forman una larga cola ante una oficina del antiguo INEM.

¿Crisis? "A la vuelta de la esquina"

Durante el Gobierno de Mariano Rajoy, una de sus mayores apuestas fue la de asegurar que con el PP se había salido de la crisis, que se consiguió la recuperación económica y se estaba creando empleo.

De esto, no hace más de dos meses y ahora los datos aseguran lo contrario. En vez de hacer análisis, Casado ha apostado por alarmar asegurando que el aumento del desempleo en agosto demuestra que una nueva crisis económica "puede estar a la vuelta de la esquina".

Es más, ha lamentado que "por primera vez en meses, el paro haya subido". "Hay indicadores que hacen pensar que la crisis que se estaba resolviendo todavía puede estar a la vuelta de la esquina", ha dicho el líder del PP.

Si preguntamos a expertos, como al analista económico colaborador de ElPlural.com, Miguel A. Rodríguez, la realidad es bien distinta. En su opinión, España lo que hizo fue salir en falso de la crisis y que “la mejora en nuestro diagnóstico macroeconómico desde el 2012 hasta el 2017 se debió a un entorno global favorable y a la actuación del banco central”.

“No dejamos de oír últimamente en medios de comunicación, por tertulianos y comentaristas no simpatizantes con el Gobierno socialista actual que la economía se encamina hacia el desastre llevado de la mano de Pedro Sánchez”, escribía Rodríguez en un reciente análisis.

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“Comentarios evidentemente absurdos tras solo dos meses de mandato, pero si, en algo tienen razón, la economía española puede empeorar en el futuro cercano, aunque de ser cierto ello solo sería fruto de la herencia del gobierno del PP que nos ha dejado un país sin capacidad de consumir y dependiente de la evolución del resto del mundo”.

Es cierto que se está intuyendo una desaceleración a nivel global, pero es eso, global. Sin embargo, Casado prefiere acusar al Gobierno de "populismo" y de querer aplicar "recetas fracasadas para problemas a veces inexistentes".

Rivera señala a la "podemización"

Nada lejos se quedan las acusaciones de Albert Rivera, que ya habla de “frenazo” en la economía de nuestro país.

El líder de Ciudadanos cree que es "preocupante" el "frenazo" de la economía y la "podemización" de la política económica. "Que Podemos nos marque la línea económica de nuestro país en un momento delicado en el que la economía se empieza a frenar es un error", ha dicho.