El periodista y escritor Juan José Millás cree que lo de Rajoy es ya una cuestión clínica:
"Es que si nosotros, usted y yo, ciudadanos corrientes, tuviéramos un familiar, un amigo, un vecino que disparatara con la soltura del presidente y en direcciones tan opuestas, hablaríamos, si no con él, con su mujer, sus hijos, su médico de cabecera, para alertarles de lo que ocurre, por si hubiera que tomar medidas de carácter clínico antes de que acabara con su prestigio y con el de su entorno", asegura en su columna del diario El País.

Le acusa de mentir compulsivamente y haberse convertido en la "versión triste del payaso alegre de Montoro" con sus solemnes intervenciones televisivas:
"No se le conoce una verdad, y en ningún ámbito, desde que le hacía la oposición a Zapatero. La gente, por loca que nos hayan vuelto, tenemos unas tragaderas limitadas. Hasta los subsecretarios comienzan a dudar de sí mismos".

El columnista, con su ironía habitual describe a Gallardón excitado "como un loco imaginando el número de mujeres que puede encarcelar con la nueva ley sobre el aborto". Y a Esperanza Aguirre insultando a los jóvenes que se ven obligados a abandonar el país ante la falta de trabajo mientras pagamos a un "banquero indigno" 88 millones de euros. "¿Por qué no nos convertimos de una vez en el burdel económico-venéreo de esta Europa prostibularia?", concluye.