Con el telón de fondo de la segunda vuelta de las elecciones francesas, España no para de experimentar cambios demoscópicos en la intención de voto. La llegada de Alberto Núñez Feijóo a la presidencia del Partido Popular ha reactivado al votante conservador y el líder gallego está consiguiendo recuperar el terreno perdido por Pablo Casado tras la fratricida lucha que emprendió con Isabel Díaz Ayuso y cuyo desenlace todos conocemos.

El crecimiento de Feijóo tiene dos frentes. En primer lugar, Pedro Sánchez. El presidente del Gobierno mantiene un evidente liderazgo en las encuestas y Feijóo lucha por volver a recuperar La Moncloa. A pesar de ser ese su principal objetivo, Génova no puede descuidar el acecho de la ultraderecha. Feijóo consigue centrar el voto y es ahí donde se ganan las elecciones; sin embargo, el trasbordo de votos a Vox es un verdadero problema para el PP. De ahí que en el futuro mantenga ciertos ramalazos extremistas. Además, Feijóo se desenvuelve con cierta inteligencia debido a su capacidad de parecer que no está, aunque en realidad sí esté. Escondido tras el Macizo Galaico, parece ajeno al pacto con Vox en Castilla y León y, un poco más al sur, a los escándalos tanto en la Comunidad como en el Ayuntamiento de Madrid. Pero sigue siendo líder de un partido que ha dado poder por primera vez en nuestro país a la extrema derecha y también del de los chanchullos en pandemia. Y, a pesar de su invisibilidad, ha de asumir esas responsabilidades. 

Teniendo en consideración todo lo sucedido, las empresas demoscópicas continúan publicando informes. Tras el análisis de los estudios emitidos por Celeste Tel, SW Demoscopia, NC Report, Sigma Dos, Electomanía, y ElPlural.com y elaborar un promedio de todos sus datos, llega una nueva edición de la madre de todas las encuestas.

Intención de voto

Tal y como refleja el estudio de ElPlural.com, el PSOE mantiene su liderazgo electoral, pero con una ajustadísima victoria ante un PP que experimenta una contrastada mejoría desde que Alberto Núñez Feijóo asumiera el poder de Génova. A pesar del crecimiento del Partido Popular, el PSOE se haría con el 25,6% de los votos y el flamante candidato gallego con el 25% de los sufragios. La llegada de Feijóo a Génova ha sentado muy bien al partido conservador y ya ha conseguido revertir el pésimo estado en el que le dejó Pablo Casado.

Además, aún manteniéndose en el segundo escalafón, los populares consiguen recuperar el terreno robado por la ultraderecha durante la crisis del expresidente del PP e Isabel Díaz Ayuso. Abascal, eso sí, se encuentra cerca de sus rivales de la derecha gracias al 19,1% de los apoyos.

Unidas Podemos, por su parte, se queda con el 10,9% de los votos, Inés Arrimadas con el 2,7% e Iñigo Errejón con el 2,5%.

Escaño

En cuanto al reparto de escaños, la victoria socialista se traduciría en 102 diputados y el subidón del PP en 101 meritorios asientos. Vox, por su parte, ocuparía 69.

Por último, el resultado de Unidas Podemos haría que la formación morada consiguiese 28 escaños, Ciudadanos debería conformarse con solo 1, lo que dejaría en una posición de extrema debilidad a Inés Arrimadas. Quien mejoraría su papel en las elecciones sería Íñigo Errejón, ya que Más País pasaría de 2 a 5 diputados.