Bajo el telón de fondo de la Asamblea General de la ONU en su 80º aniversario, los frentes de conflicto en la Comunidad Internacional están siendo el principal foco de discusión y debate. Además de la masacre que Israel está perpetuando en la Franja de Gaza, la guerra en Ucrania continúa siendo otro de los focos de preocupación y, por ello, su presidente, Volodímir Zelenski, ha señalado que las instituciones internacionales no “pueden detener el derramamiento de sangre”, por lo que la solución radicaría en entregar más armas.
En su discurso desde la tribuna de la Asamblea de la ONU, el mandatario ucraniano ha señalado que en este siglo “no es diferente al pasado, si una nación quiere la paz, necesita armas, ni la cooperación ni el derecho internacional funcionan a menos que tengas amigos poderosos dispuestos a defenderte”: “No hay garantías de seguridad sin amigos ni armas”, ha ahondado.
Zelenski ha situado como solución más eficaz las armas, “que son las que decide quién sobrevive” en una guerra. A su vez, ha hecho mención al giro argumentativo del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre el conflicto, ya que actúa como mediador entre las partes con Rusia y Ucrania: “El presidente Trump salvó la vida por menos de un centímetro, y hace un día millares de estadounidenses lloraron a Charlie Kirk. Es la violencia de las armas. Casi cada día vemos titulares de ataques violentos del mundo entero, en su mayoría son con armas. Las armas cambian más rápido que nuestra capacidad de defendernos, parar los drones es más difícil de una bomba. Es lo que ha traído la guerra rusa, los drones sencillos vuelan millares de kilómetros, a la guerra no le importa la geografía”, ha esgrimido.
Desde el punto de vista europeo, Zelenski también ha mencionado los últimos avistamientos de drones rusos en zonas de la OTAN y fuera de las fronteras de Rusia en las últimas semanas. “Han violado el espacio aéreo de Polonia. Estamos ayudando a Moldavia a defenderse de la injerencia rusa. Ya hemos perdido a Georgia en Europa, los derechos humanos y el espacio físico está mermado”, ha reiterado, urgiendo a la Unión Europea a situar el foco sobre Moldavia.
De esta manera, ha resumido su estrategia en defensa en la inversión: “Las naciones pueden hablar desde esta tribuna, pero ninguna institución puede poner fin al derramamiento de sangre”, situando así como ejemplo otros países devastados por escenarios bélicos como Palestina, Sudán o Somalia. “¿Qué pueden esperar de la ONU? Declaraciones y más declaraciones”, ha lamentado.
El giro de Trump sobre Ucrania y el papel de Putin
Este martes, también en el marco de la ONU, el mandatario de la Casa Blanca adoptó un cambio de postura en torno a la guerra en Ucrania, señalando ahora que Kiev “está en condiciones” de ganarle la guerra a la Rusia de Putin, recuperando a su vez el territorio invadido por las tropas rusas.
"Con tiempo, paciencia y el apoyo financiero de Europa, y en particular de la OTAN, -recuperar- las fronteras originales desde donde comenzó esta guerra es una opción viable", dijo Trump a través de sus redes sociales tras la reunión mantenida a puerta cerrada con su homólogo ucraniano en Nueva York.
Un giro inesperado que contrasta con la posición mantenida por Trump hasta la fecha, ya que en su última reunión con Moscú, allá por el mes de agosto, abogó porque Ucrania debía aceptar cesiones territoriales como parte del futuro acuerdo de paz.