El diputado francés Gilles Bourdouleix recibió una lluvia de críticas tras perder los nervios ante las acusaciones por racismo que le lanzaban un grupo de gitanos instalados ilegalmente en un terreno municipal y responder que "quizá" Adolf Hitler no ejecutó suficientes de ellos. "Quizá Hitler no mató suficiente", dijo el diputado de la Unión de Demócratas e Independientes cuando le increparon los ocupantes de 150 caravanas instaladas sin permiso en un terreno agrícola de la ciudad de la que es alcalde, Cholet (este).

El alcalde de ese municipio de unos 50.000 habitantes cercano a Nantes quería convencerles de que abandonasen el campamento, pero estos le recibieron haciendo el saludo nazi y tachándole de racista, según informó el diario local "Le Courrier de l'Ouest".

El político dice ser víctima de un montaje
Sin embargo, Bordouleix niega haber pronunciado tal andanada y asegura que todo responde a un "montaje escandaloso". El político va a denunciar ante la justicia al diario por "difamación y atentado contra el honor y la imagen", ya que entiende que sus declaraciones se sacaron de contexto, que la grabación está trucada y que su publicación responde a un "ajuste de cuentas". Asegura que su intención fue subrayar que si el responsable político de turno se tratara de Hitler, ejecutaría allí mismo a los gitanos, mientras que él no tenía intención de hacerlo.

Denuncia previa por racismo
"Le Courrier de l'Ouest" sostiene que alcalde y gitanos están enfrentados desde hace un año. Antes, había criticado la supuesta falta de respeto de los gitanos que viven en caravanas, a los que acusaba de disfrutar de todos los derechos y de ninguna obligación y se había dicho dispuesto a vaciar un camión lleno de excrementos junto a ellos. La Liga de Derechos Humanos del departamento de Maine-et-Loire puso entonces una denuncia contra el alcalde por aquellas declaraciones.

La dirección de su partido condena sus palabras
El diputado es presidente del Centro Nacional de Independientes y Campesinos (CNIP), que forma parte de la centrista UDI. El presidente de esa formación, el varias veces candidato presidencial Jean-Louis Borloo, ha condenado formalmente las declaraciones de Bourdouleix y ha trasladado el problema a la dirección del partido para que tome las medidas oportunas, que parece pasarán por su expulsión del partido.

Insulto a Francia
También han criticado sus palabras la Asociación Nacional de Gitanos Católicos (ANGVC) y el presidente de la Asamblea Nacional, el socialista Claude Bartolone, quien condenó las palabras de Bourdouleix en nombre de la cámara baja. "Las palabras empleadas por el señor Bourdouleix son abyectas e insostnibles. Le hacen mal a Francia. Son un insulto a nuestra historia y a nuestros valores comunes", señaló.