La Franja de Gaza continúa sitiada, con la luz y el agua cortadas y sufriendo las consecuencias de los constantes ataques militares del ejército israelí. En una nueva fase del conflicto que ya alcanza los cinco días de duración después de que Hamás llevase a cabo este sábado su golpe más fuerte en tiempo reciente, Gaza ha sido señalada por Israel como "objetivo de un asedio total". Por su parte, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha señalado que espera que Israel "se defienda de manera proporcional" y "trate de evitar la muerte de civiles".

"Israel tiene el derecho a defenderse tras el horrible ataque que ha sufrido con muchos civiles muertos. En cualquier caso, su respuesta tiene que evitar muertes civiles y ser proporcional", ha defendido el jefe político de la OTAN en rueda de prensa.

Al respecto a la posible escalada regional del conflicto, el ex primer ministro noruego ha mandado un mensaje en la misma línea que lo hizo el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, dirigiéndose a "cualquier organización hostil a Israel", en referencia indirecta al partido-milicia libanés Hezbolá y a otros agentes como Irán, para que no se planteen intervenir dada la situación de tensión que vive el país. A su vez, Stoltenberg ha sostenido que "la presencia militar estadounidense en la región va en la línea de aumentar la disuasión y evitar un aumento del conflicto".

Por otra parte, destacar que la respuesta de Israel a la ofensiva de Hamás está generando debates muy peliagudos a nivel internacional. La desproporción de la respuesta está poniendo en jaque a algunas autoridades como la Unión Europea, que inicialmente mostraron su apoyo al ente dirigido por Netanyahu, pero que ahora están apelando al derecho internacional dada la contundencia de unas operaciones militares y estratégicas que hasta el propio primer ministro israelí está compartiendo sin censura en Twitter. Las autoridades palestinas han confirmado ya 950 muertos y cerca de 5.000 heridos en los bombardeos del Ejército de Israel contra la Franja.

 

Sin luz, casi sin agua y sitiada

La ofensiva de Israel no está siendo únicamente militar, sino también estratégica y humanitaria. La única central que suministra corriente a toda la Franja de Gaza está completamente sin electricidad ante la falta de combustible, después de que el Gobierno israelí de Benjamin Netanyahu ordenara el pasado lunes el asedio total. Al tiempo, el suministro de agua está a punto de colapsar y la ONU ya ha avisado de que “la comida se está agotando” tras dos días de corte total.

Además de quedarse sin electricidad, agua, combustible y alimentos, la Franja de Gaza también está sitiada por mar, aire y tierra, lo que denunció ya el embajador palestino en España, Husni Abdel Wahed, en una entrevista. “Esto es un genocidio, con todo lo que significa genocidio (…) Me sorprende la naturalidad con la que el mundo trata este tema y el anuncio de Netanyahu que pide a los palestinos irse de Gaza. ¿A dónde? Si están sitiados por mar, aire y tierra por Israel, y viven en condiciones precarias donde no hay refugios donde puedan esconderse”, denunciaba.

Gobierno de emergencia israelí

A su vez, Benjamin Netanyahu y el líder opositor Beny Gantz llegaron este miércoles a un acuerdo para la constitución de un gobierno de emergencia para hacer frente a la guerra con las milicias palestinas. Netanyahu y Gantz rubricaron el acuerdo tras reuniones de larga duración de las que salió un comunicado conjunto, en el que quedó patente una alianza sin precedentes en el país con el único objetivo de combatir a Hamás. Tanto es así que ambas partes se comprometieron a no promover ninguna iniciativa legislativa que no esté directamente relacionada con el conflicto.

Además de Gantz y Netanyahu, el gabinete incluye al actual ministro de Defensa, Yoav Gallant, y a un reducido grupo de personas al cargo de decisiones vinculadas a las actuales operaciones militares emprendidas por la Fuerza de Defensa Israelí. “Ambos [Netanyahu y Gantz] acordaron el establecimiento de un gobierno de emergencia y un gabinete de gestión de la guerra”, se puede leer en el escrito.

Apoyo incondicional de Estados Unidos

“Como cualquier nación del mundo, Israel tiene el derecho y el deber de responder. Estados Unidos apoya a Israel y jamás dejaremos de hacerlo”. Con esta contundencia se pronunciaba el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, al respecto del conflicto. Biden, en un discurso desde la Casa Blanca este martes, se refirió a Hamás como “una organización que comete actos de pura maldad”, y lanzó una advertencia a “cualquier otro actor hostil a Israel que pretenda aprovecharse de esta situación”, sin hacer alusión directa a nadie pero, probablemente, en referencia a Hezbolá o a Irán.

“Hamás tiene las manos ensangrentadas. Es una organización terrorista que solo tiene la finalidad de matar a judíos”, sentenció el presidente estadounidense tras manifestar su “apoyo inequívoco” a Israel y a Benjamin Netanyahu. Un “apoyo inequívoco” ante el que el propio primer ministro israelí se ha mostrado agradecido en una conversación telefónica.

De dicha llamada, Netanyahu ha destacado en un corto comunicado las “contundentes palabras de apoyo” de Biden, quien se comprometió a aumentar la ayuda a Israel como respuesta a las ofensivas de Hamás. Como gesto de este apoyo, Washington ha anunciado el envío de un portaaeronaves a la zona oriental del Mediterráneo, mientras que el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, tiene prevista en su agenda una visita a Israel este jueves.