La única central que suministra corriente a toda la Franja de Gaza está completamente sin electricidad ante la falta de combustible, después de que el Gobierno israelí de Benjamin Netanyahu ordenara el pasado lunes el asedio total. Al tiempo, el suministro de agua está a punto de colapsar y la ONU ya ha avisado de que “la comida se está agotando” tras dos días de corte total. Los bombardeos de Israel contra la franja siguen, al igual que los ataques de Hamás contra el territorio israelí, lo que provoca que la cifra de muertos en ambos bandos siga subiendo.

Además de quedarse sin electricidad, agua, combustible y alimentos, la Franja de Gaza también está sitiada por mar, aire y tierra, lo que denunció ya el embajador palestino en España, Husni Abdel Wahed, en una entrevista. “Esto es un genocidio, con todo lo que significa genocidio (…) Me sorprende la naturalidad con la que el mundo trata este tema y el anuncio de Netanyahu que pide a los palestinos irse de Gaza. ¿A dónde? Si están sitiados por mar, aire y tierra por Israel, y viven en condiciones precarias donde no hay refugios donde puedan esconderse”, denunciaba.

La cifra de palestinos muertos a causa de los bombardeos israelíes ha ascendido a 1.100 -603 hombres, 171 mujeres y 326 niños- y son 5.339 las personas que han resultado heridas, según han informado las autoridades palestinas. Por su parte, las autoridades de Israel han confirmado 1.200 muertos y 3.000 heridos. Unas cifras que lejos de apaciguar las luchas han incentivado a los ejércitos. El jefe de la Fuerza Aérea israelí, Omer Tishler, ha resaltado que se están atacando objetivos en la franja “a una escala sin precedentes”.

Un corte con consecuencias catastróficas

Tras el asedio total ordenado por el Ejecutivo de Netanyahu, las reservas mínimas de combustible en la central han culminado sobre las 14:00 horas, dejando a Gaza en un apagón total que puede tener unas consecuencias humanitarias catastróficas, ya que el corte también afecta a hospitales y centros de salud.

La central tenía 400.000 litros de combustible que estaban calculados para producir energía durante un día y medio, y las necesidades eléctricas medias de la Franja de Gaza son de 550 megavatios, que hasta el viernes pasado estaban disponibles tan solo unos 205 megavatios.

El asedio total ordenado desde Israel conlleva cortes en los suministros de agua, combustible y alimentos para casi dos millones y medio de personas que viven en suelo palestino, en uno de los territorios más superpoblados y castigados del mundo.

Una severa denuncia sobre este corte de suministros la hizo el embajador palestino en España: “[Netanyahu] quiere decir que les advierte para matarles, y el mundo trata esto con naturalidad. Es sumamente grave y se debe tener conciencia de lo que está ocurriendo, porque esto no tiene otra palabra, es un genocidio”.

La ONU advierte de la escasez de alimentos

A su vez, los alimentos empiezan a escasear. Concretamente, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU ha descrito como “devastadora” la situación en la Franja de Gaza, donde “se van a agotar muy pronto los suministros de comida y necesidades básicas” si no se garantiza el reparto de la ayuda humanitaria a la población, habida cuenta del bloqueo impuesto por Israel y de los incesantes bombardeos.

Samer Abdeljaber, responsable del PMA para Palestina, ha afirmado que trabajadores de la agencia están sobre el terreno “haciendo todo lo que pueden” para atender a la población. Aspira a repartir ayuda a más de 800.000 personas, pero Abdeljaber ha advertido de que las cifras “aumentan cada día”. “Necesitamos un acceso seguro y sin trabas”, ha reclamado.

La Liga Árabe pide un “alto al fuego inmediato”

La Liga Árabe, integrada por 22 países, convocó para este miércoles una reunión de emergencia a nivel de ministros de Exteriores para abordar la nueva guerra entre Gaza e Israel y “detener la agresión israelí”. Al fin de la misma, el secretario general, Ahmed Aboul Gheit, ha pedido un “alto al fuego inmediato” entre Israel y la Franja de Gaza, mientras que ha expresado su “total rechazo a la matanza de civiles” en los momentos previos a la celebración de esta reunión en El Cairo.

Gheit ha subrayado que es necesario “brindar protección a los palestinos” y “abordar las causas profundas” que han llevado a la crisis actual provocada por el ataque de Hamás a territorio israelí. “La represalia llevada a cabo contra los residentes de Gaza siguiendo una política de castigo colectivo es contraria al Derecho internacional y no traerá la seguridad deseada”, ha señalado.

Establecido un Gobierno de Emergencia en Israel

A su vez, Benjamin Netanyahu y el líder opositor Beny Gantz han llegado a un acuerdo para la constitución de un gobierno de emergencia para hacer frente a la guerra con las milicias palestinas. Netanyahu y Gantz han rubricado el acuerdo tras reuniones de larga duración de las que ha salido un comunicado conjunto, en el que queda patente una alianza sin precedentes en el país con el único objetivo de combatir a Hamás. Tanto es así que ambas partes se han comprometido a no promover ninguna iniciativa legislativa que no esté directamente relacionada con el conflicto.

Además de Gantz y Netanyahu, el gabinete incluye al actual ministro de Defensa, Yoav Gallant, y a un reducido grupo de personas al cargo de decisiones vinculadas a las actuales operaciones militares emprendidas por la Fuerza de Defensa Israelí. “Ambos [Netanyahu y Gantz] acordaron el establecimiento de un gobierno de emergencia y un gabinete de gestión de la guerra”, se puede leer en el escrito.

Apoyo incondicional de Estados Unidos

“Como cualquier nación del mundo, Israel tiene el derecho y el deber de responder. Estados Unidos apoya a Israel y jamás dejaremos de hacerlo”. Con esta contundencia se pronunciaba el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, al respecto del conflicto. Biden, en un discurso desde la Casa Blanca este martes, se refirió a Hamás como “una organización que comete actos de pura maldad”, y lanzó una advertencia a “cualquier otro actor hostil a Israel que pretenda aprovecharse de esta situación”, sin hacer alusión directa a nadie pero, probablemente, en referencia a Hezbolá o a Irán.

“Hamás tiene las manos ensangrentadas. Es una organización terrorista que solo tiene la finalidad de matar a judíos”, sentenció el presidente estadounidense tras manifestar su “apoyo inequívoco” a Israel y a Benjamin Netanyahu. Un “apoyo inequívoco” ante el que el propio primer ministro israelí se ha mostrado agradecido en una conversación telefónica.

De dicha llamada, Netanyahu ha destacado en un corto comunicado las “contundentes palabras de apoyo” de Biden, quien se comprometió a aumentar la ayuda a Israel como respuesta a las ofensivas de Hamás. Como gesto de este apoyo, Washington ha anunciado el envío de un portaaeronaves a la zona oriental del Mediterráneo, mientras que el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, tiene prevista en su agenda una visita a Israel este jueves.

Perspectivas de Hezbolá

Por su parte, el partido y milicia libanés Hezbolá se ha solidarizado con el pueblo palestino y ha argumentado que Estados Unidos es “un socio directo de Israel y ha volcado en Washington la responsabilidad de los “asesinatos, los crímenes y las horribles masacres” cometidas en la Franja de Gaza en el marco de los reavivados combates tras el ataque de Hamás.

“No estamos para nada sorprendidos con la postura política y las acciones de la Administración estadounidense”, ha señalado el grupo libanés, que ha hecho referencia concreta al “abierto apoyo” del presidente de Estados Unidos a “la máquina de matar de la agresión sionista contra el pueblo palestino”.

En la misma línea, Hezbolá ha recalcado que el envío por parte de Estados Unidos de un portaaeronaves al mar Mediterráneo oriental “busca elevar la moral del enemigo y sus frustrados soldados, lo que revela la debilidad de la maquinaria militar sionista a pesar de los crímenes y las masacres que comete”.

“Israel necesita un continuo apoyo exterior para dar vida temporal a la entidad usurpadora. Pero las decisiones de Washington no atemorizan a los pueblos de la región”, ha expresado la milicia, que no ha descartado sumarse activamente al conflicto y que, de hecho, ya atacó posiciones israelíes con bombas de mortero el pasado domingo.