Occidente se ha tomado en serio la advertencia de los talibane sobre posibles “consecuencias” en caso de que prolongaran su presencia y violaran el deadline del 31 de agosto. Tanto el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, como la ministra de Defensa del Gobierno de España, Margarita Robles, han confirmado que las tropas abandonarán el suelo afgano en la fecha prevista a pesar de las peticiones internacionales para extender el plazo ante la imposibilidad de completar las tareas de la evacuación en la capital, Kabul.

Este miércoles, en una entrevista en Antena 3, Robles ha explicado que ya "se está planificando" la retirada definitiva del personal español que todavía permanece en Afganistán coordinando la evacuación de los colaboradores afganos. La ministra ha evitado ofrecer detalles al respecto alegando que la situación es de “riesgo absoluto”. Ha enfatizado la máxima discreción con la que trabajan para garantizar la seguridad de la operación así como de las tropas sobre el terreno. En este momento permanecen en el aeropuerto el embajador, dos diplomáticos y sendos grupos de GEOS y militares.

España se marcha si EEUU hace lo propio

El aeropuerto de Kabul funciona con relativa normalidad teniendo en cuenta las características tan excepcionales que lo envuelven. Lo realmente complicado es el acceso al mismo dado el elevado número de controles que los talibán han desplegado en las vías de acceso. La prioridad inicial fue establecer un corredor seguro para trasladar sin riesgo a los colaboradores, repatriados y refugiados. Sin embargo, la propia Robles admitió que fue imposible concretarlo. En su lugar, EEUU y Reino Unido han dispuesto un perímetro que asegura el aeródromo mientras las tropas españolas se encargan de realizar incursiones en la capital para extraer al mayor número de personas. La propia ministra de Defensa de España ha asegurado que ella misma despacha con los colaboradores afganos para “dar indicaciones” de cómo acceder al aeropuerto

Las características de este dispositivo hacen que la operación sea insostenible en caso de que cualquiera de los Ejércitos abandone su puesto, por lo que Robles ha admitido que cuando los estadounidenses se replieguen, España hará lo propio.

Prudencia ante el ultimátum talibán

Suhail Shahin, uno de los portavoces del grupo talibán, advirtió de severas “consecuencias” en caso de que Estados Unidos, así como cualquier otro país extranjero, no completen la retirada y las evacuaciones de Afganistán para la fecha fijada. En una entrevista concedida a Sky News insistió en que “es una línea roja”. Joe Biden espetó que sus tropas permanecerían allí más allá de la fecha fijada si fuera necesario con el objetivo de evacuar a todo estadounidense que lo deseara. Sin embargo, la amenaza talibán ha hecho mella.

El portavoz del Pentágono, John Kirby, confirmó este martes la salida de "varios cientos" de soldados estadounidenses tras cumplir su misión en el aeropuerto de Kabul, matizando que el retiro de tropas no afectará a la evacuación que se espera concluir el 31 de agosto. Kirby ha precisado que estos soldados han abandonado el país este martes, mismo día en el que el presidente de Estados Unidos protagonizó en tímido gesto hacia el grupo terrorista, asegurando que abandonarán el país en los plazos acordados si los talibán mantienen cierta cooperación.

El portavoz estadounidense ha calificado la marcha de estas unidades del país asiático como una gestión "prudente y eficiente" y ha asegurado que ello "no tendrá ningún impacto en la misión en cuestión", la evacuación, para cuyo cumplimiento se reforzó la presencia militar en la terminal la semana pasada: ”Se puede tener una unidad más pequeña y aun así llevar a cabo la misión”.