El voluntario de la catedral San Pedro y San Pablo de Nantes ha confesado ser el autor del incendio del templo. Se trata de un hombre de origen ruandés de 39 años que ejercía de monaguillo y estaba encargado del cierre de la iglesia.

Él mismo ha reconocido ante el juez que prendió tres fuegos, uno en el gran órgano, otro en el pequeño y un tercero en un panel electrónico. 

Según el diario Presse Océan el hombre llegó a Francia en 2012 y en marzo de este año le caducó la tarjeta de residencia, por lo que tenía orden de abandonar el país. Los miembros de la diócesis que lo conocían lo definen como alguien “extremadamente educado y un habitual del lugar”, que gozaba de toda su confianza. 

El detenido podría ser condenado a una pena de hasta diez años de cárcel y a una multa de 150.000 euros.