A menos de un mes de las elecciones generales del próximo 10 de noviembre, los partidos ya tienen configuradas sus candidaturas, esbozadas sus estrategias y articulados sus discursos. Y todo con calculadora en mano. La variable Errejón ha dinamitado cualquier intentona de proyectar unos posibles resultados de manera certera. Ya era harto complicado adivinar una foto finish dada la imprevisibilidad de la abstención y las reacciones al fracaso de las negociaciones y la sentencia del procés; máxime con el aterrizaje de Más País. Su candidato y líder, Íñigo Errejón, aseguró que tan solo concurrirían en aquellas provincias en las que pudieran aportar al bloque progresista y no perjudicar una mayoría de izquierdas. Sin embargo, no será así, puesto que no solo pone en riesgo varios escaños de Podemos, sino que sus candidaturas de Galicia pondrán en jaque la presencia de diputados morados, sean de las siglas que sean, en el Congreso de los Diputados.

Íñigo Errejón podría provocar un roto de proporciones bíblicas en la línea de flotación de las mareas y Podemos. Si se concretan las tendencias de los distintos barómetros, los dos únicos escaños que sacaron los morados en Galicia se ven amenazados

Según las proyecciones realizadas hasta la fecha, las candidaturas de Errejón podrían robar hasta un 40% del voto de la formación liderada por Pablo Iglesias. El pasado 28A Unidas Podemos obtuvo apenas dos escaños por Galicia, uno por Pontevedra y otro por A Coruña. En ambos casos, Más País compromete los sillones, con especial incidencia en A Coruña.

Unidas Podemos y las confluencias cosecharon casi 100.000 votos (99.996 concretamente) por la circunscripción de Pontevedra. Si Errejón roba el 40%, los morados se situarían en los 60.000 votos y pasarían de tercera a cuarta fuerza, por detrás de Ciudadanos, que se situó en los 63.333 votos. ¿La consecuencia? Podemos se llevaría el último escaño de los siete a repartir. Ahora bien, si los naranjas bajan, tal y como muestran las encuestas, y el voto es recogido por el Partido Popular, los populares podrían incluso disputar este último escaño a los de Iglesias, dependiendo todo de cuánto arañe Más País. Todo se dirimirá por un puñado de votos: entre 7.000/10.000.

El tirón de Bescansa, clave para el devenir de Podemos

Daniel Liceras es el candidato de Más País. Se trata de un perfil poco conocido, mientras que Yolanda Díaz, cabeza de lista de Unidas Podemos, es un rostro mediático y de gran influencia en el núcleo de Podemos. La diputada es una de las más conocidas de la bancada de Iglesias, lo que será determinante para que los morados conserven el preciado escaño.

Más complicado tendrán custodiar el logrado por A Coruña. El 28A Unidas Podemos obtuvo 99.621 votos, y una mordida del 40% les situaría en menos de 60.000. De darse este caso, se llevaría el penúltimo escaño. No obstante, se prevé una fuga masiva del votante naranja al popular, lo que a Ciudadanos no le afectaría puesto que tiene margen (sumó más de 81.000 papeletas), pero una subida del Partido Popular pordría provocar un efecto dominó que acabaría con el PSOE con un escaño más en detrimento de Podemos.

Las alarmas en esta circunscripción ya se han encendido. El secretario general de Podemos Galicia y cabeza de lista en A Coruña, Antón Gómez-Reino, es un hombre de renombre en la región, pero no tiene el tirón de Yolanda Díaz. Además, su rival no será Liceras, sino Carolina Bescansa, de sobra conocida no solo a nivel autonómico sino estatal. Se trata de uno de los rostros más reconocibles de Más País que podría provocar una sangría de votos. El escaño en esta circunscripción está caro: en torno a 50.000/60.000 votos. Cabe preguntarse no solo si Bescansa llegará a esta cifra, sino si su presencia en las papeletas provocará el descalabro morado de manera que tampoco lleguen los de Iglesias.

Fuentes consultadas por ElPlural.com del entorno de Más País en Galicia admiten que la situación “está fatal” y que “mucha suerte tendrá Carolina [Bescansa] si consigue escaño”. Barruntan un “desastre absoluto”. Pero esto no son más que estimaciones y proyecciones. La realidad es caprichosa, por lo que será el 10N y solo el 10N el que dicte sentencia.

Desde Podemos Galicia consideran que todavía hay margen y que los escaños tan solo están en juego en el peor de los escenarios.