La cabeza principal de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha anunciado este viernes que renuncia volver a presentarse como candidata a liderar la formación naranja, por lo que su 'número dos', Edmundo Bal, se postula como el que la sustituirá en el cargo. De este modo, el cara a cara de ambos dirigentes de centro que se iba a celebrar el próximo 9 y 10 de enero, finalmente, no se celebrará tal y como se anunció en un principio.   

No obstante, este no es su fin en el partido. Arrimadas presentará una lista alternativa a la de su compañero parlamentario, aunque ella no figurará como la 'número uno'. De este modo, dicho equipo estará formado por otros miembros del partido que tengan especial relevancia en el ámbito del “municipalismo” y la gestión autonómica.

En la rueda de prensa que ha concedido este viernes en el Congreso de los Diputados, ha asegurado que esta lista ya está “muy avanzada”, ya que otorgará su lugar a quienes “se van a partir la cara por el proyecto liberal” teniendo como horizonte las elecciones municipales y autonómicas de mayo de 2023.

“Mi intención es la de no encabezar esa lista; que tiene que estar liderada por gente nueva. Esa lista yo la quiero cerrar”, ha matizado. Arrimadas ya se enfrentó verbalmente a Bal ante su intención de presentarse como candidato a dirigir Ciudadanos pero, si este retiraba su propuesta, aceptaría acordar una candidatura conjunta de corte “más coral”, debido a que ambos “ya son conocidos” y gozan de “protagonismo”.

 

Por el momento, no han trascendido más detalles de esa composición que se postula al liderazgo de la formación naranja, pero Arrimadas ha defendido a capa y espada que “no se está haciendo con un boli en un despacho”.

A pesar de las circunstancias, durante su comparecencia la líder de centro sí que ha pronunciado una fina crítica contra su portavoz parlamentario: “En estos días he cogido mucho el teléfono y poco el micrófono”.