Calmar las aguas. Es el mantra que se repite a estas horas el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, para tratar de zanjar el debate interno que se ha abierto estos días en el seno del partido sobre el aborto tras haber apoyado públicamente el sistema de plazos tras el respaldo del Tribunal Constitucional a la ley de 2010. La norma, aprobada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, fue recurrida por el PP al tribunal de garantías.
Revuelo aparte, lo cierto es que el expresidente de la Xunta se ha vuelto a poner de perfil ante el ala más reaccionaria del PP y ha evitado volver a pronunciarse sobre el tema. Aprovechando que valoraba que se mantenga la inhabilitación a Oriol Junqueras, evitaba pronunciarse expresamente sobre si considera si el aborto es un derecho o no.
"Mañana tengo una rueda de prensa, otra más, y le volveré a contestar sobre ese asunto y sobre el que usted quiera", decía a los periodistas sobre su posición sobre el derecho al aborto. A pesar de las palabras de Feijóo hace tan solo unos días, fuentes de la dirección nacional del PP se han remitido a esa comparecencia, si bien ya subrayan que volveremos a ver al líder del PP retractarse de sus palabras ya que consideran que el aborto "no es un derecho".
Misma opinión mantenía el pasado lunes el portavoz del comité de campaña del PP, Borja Sémper. Tras abrir otro cisma dentro del PP y la respuesta dura del sector más conservador del partido, eludía posicionarse claramente como hacía Feijóo: "No hemos hablado en ningún momento que el aborto es un derecho". Además, indicaba que el PP "defiende la vida como eje fundamental". De esta forma, tras visitar la Casa Ronald McDonald en Madrid, Feijóo volverá a fijar su posición y aclarará lo que oficialmente piensa de la Ley del Aborto.
La posible fuga de votos a Vox
El debate abierto dentro del PP después de que Feijóo se posicionara a favor de la Ley del Aborto viene de días. El pasado viernes el gallego aseguraba que la aprobada por Zapatero es una ley de plazos "bien construida" y explicaba ante los medios que le parece "correcta" y va en línea con la legislación de otros países europeos.
Tras su intervención, el exministro Jorge Fernández Díaz o la plataforma NEOS que abandera el exministro Mayor Oreja se han convertido en la peor pesadilla de Feijóo, que trata de sortear sangría de votos de la caótica gestión de la sanidad madrileña. Sin ir más lejos, la última ha señalado que "otorgar al aborto la consideración de derecho, es un salto definitivo".
Lo cierto es que el propio Feijóo se saltó con sus palabras la posición del PP respecto al aborto. En el XVIII Congreso del año 2017 fue un asunto espinoso con multitud de enmiendas tratando de fijar una posición. Finalmente, la ponencia quedó aprobada asegurando que "el PP está firmemente comprometido en la defensa y protección del derecho a la vida. Por eso consideramos que el aborto no debe entenderse como un derecho sino como un fracaso de la sociedad".
Por ello, no han tardado en salir voces indignadas que acusan a Feijóo de hacer "seguidismo" de la izquierda alertando que tachar de "derecho" la norma respaldada por el Constitucional puede provocar una fuga de votos a Vox.
