Una nueva etapa se abre en la política española. Por primera vez desde la Transición la extrema derecha forma parte de un gobierno. Castilla y León ha sido la afortunada gracias a un pacto entre el Partido Popular de Alfonso Fernández Mañueco, con el beneplácito de Alberto Núñez Feijóo, y Vox. Sobre esto se ha pronunciado Esperanza Aguirre.

La expresidenta de la Comunidad de Madrid ha comentado en Más Vale Tarde, de la Sexta, que le parece “muy bien” el pacto rubricado y espera que pueda repetirse en más ocasiones: “Me parece estupendamente bien que Vox haya decidido apoyar al PP. Yo creo que es la primera vez que lo hacen”.

Cristina Pardo, que presentó este lunes el espacio en solitario ante la ausencia de Iñaki López, preguntó a la exdirigente popular por cuál debería ser, a su entender, la relación entre Vox y la nueva dirección de Génova; precisando que algunos integrantes se habían referido a la formación de Santiago Abascal “extrema derecha”: “¿Usted cuál cree que debería ser la relación con Vox? ¿Desacomplejada? ¿Acomplejada?”.

“Yo acabo de publicar un libro que se llama Sin complejos así que te agradezco que me hagas propaganda del libro. Por supuesto desacomplejada. A mí no me preocupa Vox. Yo creo que es un partido perfectamente constitucional del que yo discrepo en algunas cosas y estoy de acuerdo en otras. En las más importantes, evidentemente”, ha razonado Aguirre.

Así, la exlideresa del PP ha esgrimido el argumentario oficial del PP: que a ella lo que le preocupa son los socios del Gobierno de Pedro Sánchez, a saber, Unidas Podemos, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y EH Bildu, y no tanto Vox. Y como no podía ser de otra manera al tratarse de Aguirre, se ha referido a ellos como “comunistas”, “bilduetarras”, “los independentistas catalanes”, “los del fugitivo Puigdemont”.

“A mí lo que me gustaría es que todos esos que están apoyando al PSOE fueran perfectamente constitucionales como lo es Vox pero no lo son”, ha concluido.