Hay acuerdo. El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha anunciado un acuerdo entre el Partido Popular y Vox para gobernar conjuntamente, de manera que, por primera vez desde la Transición, la extrema derecha formará parte de un ejecutivo.

En declaraciones a los medios de comunicación, ha manifestado estar “muy satisfecho del acuerdo logrado” ya que permitirá la articulación de “un gobierno sólido y estable”. El presidente de la Junta no ha querido entrar en más detalles y ha emplazado a aguardar a la rueda de prensa posterior en la que explicará los flecos.

Fuentes de la formación ultraderechista han apuntado que su partido no ha recibido “ni más ni menos” que Ciudadanos, por lo que cabe esperarse que ostenten la presidencia del parlamento autonómico, la vicepresidencia y un grueso de tres consejerías. Así, el procurador electo de Vox por León, Carlos Pollán, ha sido elegido nuevo presidente de las Cortes de Castilla y León, tras obtener el respaldo de los 31 procuradores del PP y los 13 de su propio grupo.

Bendiciones y maldiciones

El portavoz del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, Javier Maroto, ya ha bendecido el “difícil”, pero “valiente” paso de Mañueco de pactar con Vox. Unos minutos antes de comenzar la sesión constitutiva en las Cortes, el dirigente popular ha responsabilizado al PSOE de no haber dado otra opción que echarse en manos de la formación liderada por Santiago Abascal por descartar desde un principio cualquier acercamiento posible.

"La decisión de bloquear cualquier alternativa para un gobierno en solitario por parte del PSOE ha tenido en Alfonso Fernández Mañueco una reacción valiente, una reacción responsable y lógica, que es dotar de estabilidad a la Comunidad de entre todos los escenarios posibles, que es lógicamente el de buscar un acuerdo entre PP y Vox", ha sostenido.

Por su parte, el PSOE ha calificado de “indignante” que Castilla y León sea la “primera región en Europa gobernada por la extrema derecha”; haciendo especial hincapié en que “este es el PP de Feijóo”.

Ione Belarra, secretaria general de Podemos, ha lamentado la cohesión de las derechas, cimentada tras “meses de competición por la política del insulto, el odio y la inseguridad social. “PP y Vox demuestran con este acuerdo que son indistinguibles. El bloque democrático debe luchar para que no lleguen al Gobierno del Estado”, ha razonado. En la misma tónica, el portavoz parlamentario en el Congreso, Pablo Echenique, ha advertido que Feijóo ya ha desvelado cuál será el nuevo rumbo del PP: “Moderadísimo”. El presidente de la Xunta y aspirante a liderar el PP, ha dicho “sí a meter a la ultraderecha racista, homófoba y aliada de Putin en los gobiernos”. El candidato de Unidas Podemos en Castilla y León, Pablo Fernández, ha calificado la maniobra de "vergüenza" e "ignominia para nuestra tierra".

El candidato de Ciudadanos a la Presidencia de la Junta y procurador electo por Valladolid, Francisco Igea, socio de Gobierno Mañueco hasta que disolvió las Cortes el pasado mes de diciembre para convocar elecciones anticipadas, ha tachado de "vergüenza" el acuerdo con Vox.