El lehendakari vasco, Íñigo Urkullu, no ha utilizado las medias tintas para desmarcarse de la ‘vía’ de Junts pel Si y la CUP hacia la independencia: “es imposible”, ha dicho a la declaración unilateral que los partidos secesionistas catalanes pretenden seguir. Idea que ha rematado pidiendo sinceridad: “Hay que decir las cosas con claridad, cualquier declaración que se haya hecho pasa por un proceso de conversaciones, de diálogo y negociación con el Gobierno del Estado”.
"No creo en la unilateralidad"
Al explicar este pensamiento, Urkullu tampoco ha dejado dudas de su desacuerdo con Artur Mas y sus socios: “Yo no creo en la unilateralidad y vengo denfendiendo, en relación a España y el Estado español, la bilateralidad, en la que se basa el sentido de pacto”.
Durante una entrevista con la Cadena SER, el presidente vasco ha advertido también que el proceso de independencia es “un proceso largo, en todo caso”, porque “hay que mirar el contexto en el que vivimos, que no sólo es el del Estado español, sino que también es la Unión Europea. Y no se crea un Estado independiente en la UE de la noche a la mañana”.
"Nula inteligencia" del Gobierno central con las nacionalidades
Urkullu, eso sí, ha repartido la responsabilidad de la situación catalana con el Gobierno central. Ha hablado de “nula inteligencia” por parte del ejecutivo PP en su relación con las nacionalidades. Lo que le ha llevado a decir que ve imposible que Mariano Rajoy sea la persona que pudiera dirigir unas conversaciones entre independentistas y el Gobierno: “no el Rajoy que conozco, al menos”, ha dicho.
Y ha aprovechado para recordar que el silencio no es ‘una política’ que el Presidente español haya utilizado con Artur Mas y Cataluña, que a él aún no le ha contestado a las propuestas que le hizo en su última entrevista, hace ya 18 meses. Un comentario casi melancólico que le ha llevado a decir que le gustaría tener otro Rajoy al frente del Gobierno central: “lo que se necesita es un Cameron que pueda dialogar para llegar a acuerdos y ofrecer soluciones”.
Reuniones con tinte electoral
Tras estas palabras, como podía imaginarse, Urkullu ha dicho que espera un nuevo gobierno a partir del 20 de diciembre, que no busque un frentismo y las trincheras del que se declara enemigo, y por lo que el PNV no ha querido acudir a unas entrevistas en Moncloa “en un espacio preelectoral y las citas de Rajoy tienen un tinte electoral”.
