El ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, ha anunciado este lunes que el teléfono del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el de la ministra de Defensa, Margarita Robles, han sido infectados con el software Pegasus.

Bolaños ha señalado que el Gobierno ha puesto en conocimiento de la justicia dos informes técnicos del Centro Criptológico Nacional (CCN), adscrito al Centro Nacional de Inteligencia (CNI), en los que se detallan los hechos.

Así lo ha manifestado durante su intervención en una convocatoria de urgencia este 2 de mayo en La Moncloa, junto a la ministra Portavoz, Isabel Rodríguez, quien ha resaltado la "relevancia" del asunto que ha motivado la comparecencia.

Moncloa responde a todas las incógnitas

Tras la comparecencia de Bolaños y Rodríguez, muchas son las incógnitas que han quedado en el aire. Unas dudas que Moncloa ha intentado disipar respondiendo a tres preguntas fundamentales sobre el asunto: ¿Son seguras las comunicaciones del presidente? ¿Es una cortina de humo? ¿Por qué se ha tardado casi un año, desde junio de 2019, en detectar el ataque?

¿Son seguras las comunicaciones del presidente?

Lo son. Son seguras. Los refuerzos que se realizan constantemente en la seguridad de las comunicaciones del presidente han demostrado ser eficaces.

Según los informes técnicos del Centro Criptológico Nacional, se produjeron dos intrusiones en el terminal del presidente en mayo de 2021 y una en el móvil de la ministra de Defensa en junio de 2021.

No hay prueba alguna de intrusión posterior a esa fecha, por lo que parece que las sucesivas actualizaciones de los protocolos que se han ido instalando desde entonces han sido eficaces para evitar el uso de Pegasus.

¿Es una cortina de humo previa a la comparecencia de Robles?

Insinuar que el Gobierno pretende instrumentalizar algo tan grave sólo califica a quien lo hace. Es irresponsable. Y es frívolo. Impropio de alguien que aspire a tener responsabilidades de Gobierno. Cuando decimos que no todo vale para hacer oposición es este es un ejemplo perfecto.

No hemos sido los primeros y seguramente no seremos los últimos. Existe constancia de que el software Pegasus ha sido utilizado de modo ilícito en más de 20 países y que entre las víctimas de estas intrusiones figuran gobiernos, responsables públicos, informadores y personalidades de diferentes ámbitos.

¿Por qué se ha tardado casi un año, desde junio de 2021, en detectar el ataque?

Los ataques, dos, se produjeron en mayo de 2021, pero no hubo intrusiones posteriormente.

El terminal del presidente está sometido a los procedimientos y protocolos de seguridad exigibles. Por tanto, no es que haya estado un año expuesto, sino que hemos acreditado ahora los hechos ocurridos entonces.

No es un procedimiento fácil; ni puede hacerlo cualquiera, ni puede hacerse de cualquier manera. Es un método intrusivo que requiere tiempo para que los expertos trabajen con el terminal, que permanece fuera de disposición 24 o 36 horas mientras se realiza el estudio. Hay que hacer compatible la seguridad con la operatividad.