El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, desde Dinamarca este jueves, ha criticado la marcha de Ferrovial de España con destino a Países Bajos. De este modo, ha señalado que en el país hay ejemplos de grandes empresarios pero, al analizar al detalle este anuncio, el presidente de la empresa, Rafael del Pino, no es uno de ellos. 

En una comparecencia ante los medios de comunicación en su visita institucional a Dinamarca, Sánchez ha asegurado que los empresarios tienen una enorme responsabilidad social en la sociedad "en la que nacen y desarrollan toda su acción" y que además hay en España ejemplos "extraordinariamente positivos" de grandes empresarios comprometidos con su país. "Desde luego, con este anuncio, no es el caso del señor del Pino", ha sentenciado.

Además, el jefe del Ejecutivo de coalición ha advertido de que el Gobierno va a seguir la situación y comprobará si el anuncio que se ha hecho "corresponde con la legalidad". Así, ha trasladado que los empresarios juegan un papel muy importante en la sociedad y que así lo ha reconocido el Gobierno con distintas medidas durante la pandemia y la guerra en Ucrania que les han permitido "aumentar su actividad económica" incluso en momentos complejos como estos.

Ferrovial insta a que “nadie dude” de su continuidad en España

En palabras del consejero delegado de la empresa, Ignacio Madridejos, Ferrovial llama a la ciudadanía a que “nadie dude” de que continuarán en España a pesar de haber trasladado su sede a Países Bajos, dando así garantías de que seguirán contribuyendo fiscalmente al país “como siempre se ha hecho”. “El presente y el futuro de la empresa sigue en España y Europa”, ha defendido.

No obstante, los planes de reforzar su potencialidad en suelo europeo ya han comenzado, ya que el cambio de sede implicará el consiguiente traslado de un volumen de los trabajadores de la entidad hacia Países Bajos, aunque este será de forma voluntaria, tal y como se ha firmado en el documento de fusión entre Ferrovial y la filial neerlandesa Ferrovial International y que se ha publicado en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) dos días antes de hacer público el anuncio. De este modo, la empresa de Del Pino insiste en que este giro de los acontecimientos no tendrá fuertes repercusiones en el empleo, por lo que no se contempla la adopción de medidas laborales.

Garamendi defiende a Ferrovial

En contraposición con la postura adoptada por el presidente del Gobierno, el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, ha salido en defensa de Ferrovial, instando así a respetar su decisión de trasladar su sede fuera del territorio español.

Siguiendo esta línea, ha llamado a “no demonizar” a las empresas ni a los empresarios, puesto que son los que generan “riqueza” en el país. “La compañía lo ha explicado, prácticamente el 85% de su negocio está fuera de España. Además, va dentro de la Unión Europea (UE), a un país europeo. Holanda, quiero que se aclare, que yo sepa es un país europeo, no un paraíso fiscal”, ha aseverado.

A la contra, los sindicatos, tanto UGT como Comisiones Obreras (CCOO) han vertido duras críticas, señalando que la compañía hace uso de la bandera del país para, después, abandonarlo. “Es impresentable. Es una empresa que, desde mediados del siglo pasado, se ha nutrido fundamentalmente de recursos públicos, de licitaciones públicas”, ha condenado, por su parte, Unai Sordo, secretario general de CCOO.

El PP acusa al Gobierno de “maltratar” a las empresas y justifica la marcha de Del Pino

A modo de réplica a las declaraciones de voces de Moncloa, desde Génova, el coordinador general del PP, Elías Bendodo, a pesar de tildar como “mala noticia” la salida de la empresa de Del Pino de España, se ha posicionado en mitad de la balanza diciendo “entender” su decisión, de que haya empresas que “no aguanten la presión y el maltrato” del Gobierno de Sánchez.

“Este Gobierno les ha traído -a las empresas- inestabilidad e inseguridad jurídica”, ha esgrimido Bendodo desde la sede del PP en rueda de prensa este jueves, insistiendo en que las dos formaciones que conforman al Ejecutivo de coalición, PSOE y Podemos, tratan como “villanos” a los empresarios.

“Nos preocupa que esta decisión venga como antesala de algunas más”, ha apostillado, un escenario que no se contempla, dado que ‘las grandes del Ibex’ tales como Repsol o ACS descartan un ‘efecto dominó’.