Ciudadanos no termina de dejar claro si pactará con Vox o no. De momento, ha delimitado que lo haría con el PSOE si “renuncian al sanchismo y aceptan la aplicación del 155”. Dos condiciones que, previsiblemente, no serán satisfechas por parte de los socialistas, que continúan lanzando guiños a diestro y siniestro a Rivera.

El líder de Ciudadanos no los recoge, de hecho los ignora. Pero tampoco recoge la caña que tira Vox constantemente a su partido. De momento, los ultraderechistas han avisado de que no facilitarán un gobierno en el que no estén ellos y han pedido “respeto”. Este hecho ha provocado el enfado de un rostro célebre de la derecha española a día de hoy: Rosa Díez.

La que fuera fundadora de UPyD, a través de Twitter, ha criticado a la formación naranja sin mencionarla. “Lo de los asquitos a Vox me sigue pareciendo pura hipocresía”, lamentaba la exdiputada magenta en el Congreso, que preparaba un parapeto perfecto, a la par que sorprendente, a Vox.

Son de derechas, sí, pero no dan golpes de estado, ni queman contenedores ni llaman a levantamientos populares contra lo decidido en las urnas como hicieron PSOE y Podemos la noche de las elecciones andaluzas”, puntualiza la exdiputada de la formación magenta.