El presidente de Perú, Ollanta Humala (d), saluda al presidente del Ejecutivo español, Mariano Rajoy (i), durante su visita ayer al Palacio de Gobierno en Lima. EFE



El presidente del Gobierno asegura que no quiere interferir en la investigación interna del PP sobre el escándalo Bárcenas. En una conversación informal con los periodistas durante su viaje oficial a Chile volvió a hacer gala de su ambigüedad habitual al asegurar que no piensa desmentir si recibió sobres de dinero negro como han hecho la mayoría de altos cargos del partido. Según relata El Mundo, considera una obligación dar "carta blanca" a Carmen Navarro, actual tesorera del PP, para que investigue y "llegue hasta el final".

Ello, sumado a la auditoría externa encargada a una empresa independiente, según el jefe del Ejecutivo, pone punto final a su labor en este caso: "De este asunto yo ya no me preocupo. Esperaré a lo que la gerente diga", comentó. Añadió que no tenía intención de decir "nada más" al respecto y rehusó hablar a su favor desmintiendo que haya podido ser uno de los beneficiarios de la supuesta red de sobresueldos de Bárcenas.

En su opinión, la investigación demostrará que "no todos somos iguales y que es injusto el tratamiento que se está dando a los políticos".