La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha acordado la devolución al juez de la Audiencia Nacional Manuel García Catellón de las actuaciones contra el vicepresidente segundo del Gobierno y líder de Podemos, Pablo Iglesias, para que agote la investigación en el denominado 'caso Dina'  y en su caso, cuando lo haya realizado, decida si procede remitir una nueva exposición razonada contra el aforado.

De este modo, el instructor del caso Villarejo tendrá que practicar todas las diligencias necesarias para concretar si Dina Bousselham vio su intimidad violada por el acceso de Pablo Iglesias a sus datos privados. Dicho de otro modo, la posible imputación del vicepresidente del Gobierno está en manos de su antigua asesora.

¿Quién es Dina Bousselham, directora de ‘La Última Hora’?

Dina Bousselham nació en Tánger el 27 de julio de 1990 y aterrizó en España para estudiar Ciencias Políticas y de la Administración en la facultad de Somosaguas, centro de la Universidad Complutense de Madrid donde nació Podemos y en buena parte otros movimientos políticos como Juventud Sin Futuro y el propio 15-M, del que Bousselham formó parte.

Además de sus estudios en Madrid, realizó un Máster en Estudios de América Latina y el Caribe del Institut des Hautes Études de l’Amérique Latine de Paris. Bousselham fue integrante del equipo de Podemos en el Parlamento Europeo, trabajando como asistente parlamentaria de Pablo Iglesias desde sus inicios como eurodiputado. En octubre del 2015, a la vuelta de Iglesias a España como candidato a la presidencia del gobierno, volvió a Madrid como integrante de su equipo.

En su propia biografía -que compartió en la página web de Podemos de la Comunidad de Madrid-, Bousselham ya destacaba sus colaboraciones en diversos medios de comunicación. En mayo de 2020, tras su paso como asesora de Servicios Sociales y Mayores en el Ayuntamiento de Coslada (Madrid), abandonaba todas sus responsabilidades orgánicas en la formación morada (formaba parte de la gestora de Podemos en la Comunidad de Madrid) y se convertía en la directora del recién fundado diario digital La Última Hora.

Pocos días después de su fundación -exactamente el 24 de mayo de 2020-, Podemos animó a sus inscritos a hacerse socios de 'La Última Hora', al que la formación morada tildaba como una “herramienta fundamental” para “señalar a los grandes poderes”, defenderse de las fake news y recibir una información crítica. Respecto a Bousselham, desde Podemos se elogiaba que “Dina ha sido siempre un ejemplo de valentía para enfrentarse a la cloaca mediática enemiga de la democracia y de la justicia social”. 

Fuentes de la dirección del partido de Pablo Iglesias han asegurado a ElPlural.com que pese a su evidente sintonía, ‘La Última Hora’ es un medio independiente del partido. Sin embargo, el pasado 4 de diciembre, la excordinadora de Podemos Andalucía y líder de los Anticapitalistas, Teresa Rodríguez, sostenía todo lo contrario en la demanda que interponía contra Bousselham y su medio digital..

En concreto, la líder andalucista sostenía que "La Última Hora Noticias y doña Dina Bousselham, no están ejerciendo labores de información, sino ponerse al servicio de una de las partes del conflicto político existente en Adelante Andalucía, para difundir falsedades”. A este respecto, Teresa Rodríguez hacía hincapié en que "es pública y notoria la militancia de la directora del medio digital en el que se publica el artículo -Dina Bousselham- en el partido político Podemos, participando en el mismo desde su fundación”.

¿Qué es el ‘caso Dina’ y qué ocurrió con el robo del móvil?

El llamado ‘caso Dina’ nació en marzo de 2019 después de que los investigadores hallaran en casa del comisario en prisión José Manuel Villarejo una “importante cantidad de documentos” que parecían “provenir de una extracción de datos” del móvil de Dina Bousselham.

Bousselham había denunciado el robo de su teléfono en noviembre de 2015. Los hechos supuestamente tuvieron lugar cuando se encontraba con su exmarido, Ricardo sa Ferreira, en el Ikea de la localidad madrileña de Alcorcón.

En concreto, a Bousselham le habrían robado el abrigo, la cartera y un teléfono móvil de la marca Sony Experia y modelo Z2. En su interior, el dispositivo tenía una tarjeta de memoria SD en la que aparecían fotografías íntimas de ella y de Pablo Iglesias, conversaciones privadas y documentos de estrategia política de Podemos.

Algunos de esos datos aparecían en la primera versión del informe PISA (acrónimo de Pablo Iglesias S. A.) -un falso documento policial que fue rechazado por la justicia y donde se afirmaba falazmente que el Gobierno de Irán había financiado al partido morado-. Conversaciones entre miembros de Podemos que contenían ese móvil también fueron publicadas en el periódico digital Okdiario en julio de 2016. 

Tanto Podemos como Pablo Iglesias siempre sostuvieron que el robo del teléfono móvil fue perpetrado por la llamada policía patriótica “con el claro objetivo de desprestigiar su imagen en momentos electorales clave”.  

Sin embargo, la causa dio un giro en mayo de 2020 cuando, después de algunas contradicciones de la excolaboradora, el juez centró sus pesquisas en averiguar qué había ocurrido con una tarjeta que contenía una copia de esa información y que, tras pasar por manos del actual vicepresidente, llegó dañada a la Audiencia Nacional.

Lo cierto es que en sede judicial, Bousselham admitió que ella misma había hecho y enviado algunos de los pantallazos de las conversaciones de Telegram (aplicación de mensajería instantánea) que acabaron publicados en medios de comunicación, como Okdiario. Sin embargo, en una anterior declaración ante el juez, Bousselham había negado ese extremo.

Por su parte, Pablo Iglesias aclaró que se quedó durante meses una copia de la tarjeta móvil de  Bousselham “para no someterla a más presión" porque distintos medios habían publicado que tenían una relación "y eso le supuso una presión enorme”.

“Yo recibo una de esas copias. Me la da el señor Asensio [presidente del Grupo Zeta, editora de la revista Interviú, que recibió el contenido del móvil y que optó por no publicarlo al contener datos íntimos] que me dice que a lo mejor, con suerte, es la única. Cuando examino el contenido, tomo una decisión, que es no someter a Dina Bousselham a más presión. Se había dicho que tenía una relación conmigo, eso le supuso a Dina una presión enorme. Yo veo allí que había fotos suyas”, afirmó Iglesias. 

¿Por qué el futuro judicial de Pablo Iglesias está en manos de Dina Bousselham?

Con su decisión conocida este miércoles, la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo considera necesario que Bousselham sea oída de nuevo para aclarar las distintas versiones que ha dado y concretar si vio su intimidad violada por el acceso de Pablo Iglesias a sus datos privados.

Bousselham también deberá aclarar si mintió al ser consciente de que las capturas de pantalla publicadas en prensa eran las que ella misma había enviado a otras personas sin que Iglesias lo supiera, dejando así de lado el hecho de que pudieran proceder del entorno de Villarejo.