Las heridas que ha dejado la reforma de la ley del ‘solo sí es sí’ en el seno del Gobierno de coalición poco a poco van cicatrizando. Después de varios días de declaraciones cruzadas, y pese a que ambas formaciones siguen reconociendo discrepancias, PSOE y Unidas Podemos empiezan a acercar posturas para cerrar este capítulo y salvar lo que resta de legislatura.

Una vuelta al diálogo que este viernes iniciaba el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mostrando su total confianza a todos los ministros ante una hipotética ruptura del Gobierno por los diferentes criterios políticos de socialistas y morados. “Ya le digo que no. No se contempla, al contrario, el Gobierno de coalición continúa”, subrayaba Sánchez en una rueda de prensa desde Bruselas. “Todos mis ministros cuentan con mi confianza, desde luego también la de Igualdad”, añadía.

Una idea sobre la que han vuelto a incidir este sábado los socialistas. En esta ocasión, ha sido Miquel Iceta, ministro de Cultura y Deporte, quien ha aprovechado una entrevista en Catalunya Ràdio para asegurar que las discrepancias entre los socios del Gobierno “no ponen en peligro la coalición”.

“Cada vez hay un acuerdo más importante en que la ley se tiene que revisar”, ha señalado Iceta, que se ha mostrado convencido de que ambas formaciones terminarán por encontrar una fórmula para llegar a un acuerdo.

Podemos pide “tranquilidad” y descarta romper aun si la reforma sale con el apoyo del PP

Una llamada a la mesura que también comparten desde Unidas Podemos. Prácticamente al mismo tiempo que Iceta, Jaume Asens, presidente del grupo parlamentario de los morados en el Congreso, ha pedido “tranquilidad” a ambas partes, dado que hay voluntad de acuerdo.

De hecho, Asens, en una entrevista concedida al programa ‘Parlamento’ de RNE, ha asegurado que la coalición no se rompería incluso en un hipotético caso de que la reforma planteada por el PSOE de la ley del ‘solo sí es sí’ saliera adelante con el apoyo del Partido Popular –los de Feijóo ya han adelantado que apoyarán la norma-: “No sería un motivo”.

Sin embargo, el dirigente morado ha reconocido que dicho escenario supondría algo “inédito”, por lo que ha confiado en que impere la “responsabilidad” porque optar por “entenderte” con la derecha en esta materia generaría “alarma social” en el feminismo a las puertas de los comicios de mayo.

En este sentido, el también líder de En Comú Podem ha dejado claro que en las negociaciones "todas las partes han de ceder algo" y, en este caso, Unidas Podemos ya ha concedido "mucho", al aceptar que se cambie el texto y avenirse a subir penas pese a que el "punitivismo" es el "marco de la derecha" que el PSOE "ha comprado".

Y es que ha defendido que su espacio político se hace cargo de la preocupación suscitada por la rebaja de condenas desde la entrada en vigor la ley 'solo sí es sí' y se abre a retoques, siempre y cuando los socialistas asuman que no afecte a la "centralidad" que debe tener el consentimiento.

Pese a todo, Asens ha remarcado que el Gobierno de coalición es "fuerte", debe dar "certeza" y no pueden plantear escenarios de desunión en momentos como el actual. También ha minimizado el impacto de esta discrepancia en la salud de la coalición, dado que ya se han dado tensiones antes y no sería extraño que volvieran a darse en el futuro, pero en ningún caso deben afectar a la gobernabilidad.