Se acabó la expectación. Cuca Gamarra ya tiene sustituto al frente de la portavocía del PP en el Congreso de los Diputados. Se trata de Miguel Tellado el encargado de coger las riendas en este cargo, que Feijóo le quita a Gamarra para estar centrada al completo en la secretaría general del partido.

Fuentes populares han confirmado que esta será la persona que a partir de ahora dará la batalla en la Cámara Baja, mientras que la otra que estaba en las quinielas -Carmen Fúnez- reemplazará a Tellado en la estructura del partido asumiendo la nueva vicesecretaria de Organización.

No obstante, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, propondrá estos nombramientos al Comité Ejecutivo Nacional, que serán previsiblemente aprobados.

Miguel Tellado fue secretario general del Partido Popular de Galicia entre 2016-2022 y director de las dos últimas campañas electorales en esa comunidad. Tellado también ha sido portavoz del PP en Galicia, diputado autonómico desde 2012 a 2022, senador por designación autonómica en la XIV legislatura y ahora es diputado en el Congreso.

Feijóo anunció el sábado la continuidad de Gamarra como secretaria general

El pasado sábado, el líder del PP confirmaba en el comité del partido en La Rioja que Gamarra había sido una “excelente secretaria general a tiempo parcial” y que ahora “lo va a ser a tiempo completo”, descartando de este modo su continuidad en el Congreso de los Diputados.

Después de elogiar su carrera profesional, el líder popular subrayaba que la ya solo secretaria general es la “mejor persona” para “ordenar” una formación “que tiene más poder territorial que nunca” y que tiene que “hacer frente al peor Gobierno que ha tenido España en sus 45 años de democracia”, asumiendo que es “la mejor persona para hacerlo”: “Ha dado a la política nacional lo mejor de su CV y de su experiencia”.

El expresidente de la Xunta elogiaba la manera en la que Gamarra “ha crecido en la escuela de la política, que es el municipalismo, cómo ha sido una excelente alcaldesa de Logroño durante un tiempo”: “Empezó la anterior legislatura como diputada novata y en tan solo un año y medio se ha hecho con la dirección, el control y el respeto de todos sus compañeros”.

De la misma manera, Feijóo se desprendía en elogios hacia su labor en el último año y medio como secretaria general del partido. “Ha demostrado que es una persona que sabe trabajar, que trabaja más que nadie, que tiene inteligencia, capacidad de trabajo y que conoce el partido y, por tanto, también con su rapidez y vocación, ha demostrado que es una política fiable”, apostillaba.

El jueves, el resto de la reorganización

El presidente del partido conservador ha avanzado en las últimas horas que el próximo jueves celebrará un Comité Ejecutivo Nacional en el que culminará la reorganización de su equipo, aunque después de hoy la incógnita principal queda ya despejada.

En compañía de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, el gallego apuntaba a un refuerzo de su alineación política con “nuevas ideas y enfoques” para “derribar los muros que el Gobierno quiere construir” y sustituirlos por “puentes con los ciudadanos”: “Frente a un Ejecutivo que divide, quiero decirles que van a tener una oposición refugio y el altavoz de todos”.

“Se habla mucho de amnistía, de independencia, de condonaciones de deudas a las comunidades que más dinero tienen a costa de las que menos tienen y yo creo que de lo que se debe hablar es más de precios, de cómo podemos bajar las hipotecas, o al menos ayudar a que baje, y cómo podemos llegar a fin de mes”, estimaba obviando que es precisamente su partido el que incide, casi de manera exclusiva, únicamente a estas cuestiones.

A falta del Senado

Entre las cuestiones a despejar ahora se encuentran la portavocía en el Senado, pero para esto todavía habrá que esperar unos días. Las apuestas para el reemplazo de Javier Arenas pasan por un nombre en femenino, que podría ser el de Paloma Martín o Rosa Romeo.

El PP quiere convertir el Senado en su baluarte y utilizarlo para torpedear al Gobierno de coalición. El último ejemplo de esto pasa por intentar vetar el reparto del déficit por administraciones, aunque, tal y como deja claro el Ejecutivo, la oposición no podrá hacer lo propio con el techo de gasto, asunto contemplado en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) que el Ejecutivo espera sacar en el primer trimestre de 2024.