El agente financiero Allen de Jesús Sanginés-Krause, actualmente investigado por dotar el rey emérito de dinero de forma irregular, a través de tarjetas opacas, participó de diferentes operaciones que contaron con el apoyo de la realeza, en concreto del propio Juan Carlos, según desliza el diario El Mundo.

Entre las más destacadas se encuentra el asalto a Repsol por parte del gigante ruso Lukoil en 2008, de quien el agente financiero fue representante. La idea de esta segunda empresa era comprar el 30% de la industria petrolera, para lo que Allen se movilizó con la banca para la financiación, que podía llegar a 9.000 millones de euros.

El entonces ministro de Industria, Miguel Sebastián, rechazó la operación al considerar que la españolidad de un grupo estratégico como es la petrolera corría peligro. Sin embargo, ante la negativa del ministerio y del propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el magnate mexicano con nacionalidad británica encontró el apoyo de Juan Carlos.

Además del antiguo rey y el magnate mexicano, hay otra persona que se posicionó a favor de la compra de Repsol, Corinna Larsen, que por aquel entonces mantenía una relación con Juan Carlos.

Otra operación similar y de la que participaron las mismas tres personas fue el fondo hispano saudí montado en 2006 que en principio iba a promover inversiones en ambos países. La operación estaría dotada de 1.500 millones de euros que aportarían importantes empresas sauditas y del IBEX. sin embargo, la operación fracasó en 2010, año en que todas las empresas inversoras presentaron pérdidas.

La última inversión del mexicano en nuestro país se corresponde a 2018, cuando el magnate adquirió el lujoso Hotel Villa Magna de Madrid por valor de 210 millones de euros.