Miguel Frontera, el ultra que estaba acusado de acosar durante siete meses a Pablo Iglesias e Irene Montero a las puertas de su vivienda de Galapagar, ha sido absuelto este lunes por el juzgado de lo penal de Madrid. La Fiscalía pedía 12 de meses de prisión para Frontera por delitos como el descubrimiento y revelación de secretos, además de 2 años por injurias y calumnias contra ambos políticos. Sin embargo, la jueza Belén Pérez Fuentes ha exonerado al acusado de todos los cargos al encontrar que no había suficientes pruebas que indicaran que Frontera tuviera la intención de "vigilar o buscar cercanía física" con la pareja.
La sentencia final ha sido denunciada por Pablo Iglesias a través de sus redes sociales, mostrándose muy disconforme con la asbolución del ultra.
¿Recuerdan a Miguel Frontera? Es el ultra que acosó a mi familia durante casi un año. La fiscalía pedía 12 meses de prisión por Descubrimiento y Revelación de Secretos y 2 años de prisión por Injurias y Calumnias. La jueza Belén Pérez Fuentes le ha absuelto pic.twitter.com/hmWBDSCm6e
— Pablo Iglesias 🔻{R} (@PabloIglesias) July 1, 202
El juicio de Frontera
Durante el juicio en Madrid, el acusado ha pretendido excusar sus actos en el domicilio de Iglesias y Montero, alegando que la persona que recibía acoso era él mismo. "El que recibió acoso real, un acoso dramático, he sido yo”, aseguró ya en su momento. Después de ello, ha querido justificar las caceroladas a las puertas de la vivienda de Galapagar haciendo referencia al exvicepresidente del Gobierno. “El ideólogo ha sido Pablo Iglesias, el que pidió una cacerolada contra el rey fue Pablo Iglesias”, alegó durante el juicio.
La letrada del ya absuelto, presidenta de Abogados Cristianos, Polonia Castellanos, ha llegado a preguntar durante el juicio si los hijos de Iglesias y Montero "sólo se despertaban y molestaban cuándo ponían el himno de España" por la megafonía de los altavoces que colocaban los allí presentes, además de Frontera.
Durante la celebración del juicio, varios ultras acudieron a las puertas de la sala número 14 para seguir profiriendo insultos contra la pareja de políticos, especialmente a Irene Montero, quién era candidata a los comicios europeos. Según recoge el medio eldiario.es, Francisco Zugasti, ultra conocido por acudir a los juzgados con pancartas con mensajes como "STOP feminazis", estuvo presente durante el juicio de Frontera, dónde pudo espetar a Pablo Iglesias: "Atente a las consecuencias". Zugasti también acudió a las congregaciones de ultras en Galapagar, y acabó siendo condenado por increpar a un guardia civil a las puertas del domicilio de Iglesias y Montero.
Los actos de Frontera frente a la casa de Montero e Iglesias
El ahora absuelto comenzó a ganar seguidores en sus redes sociales durante la pandemia, cuándo consiguió movilizar a decenas de personas para participar en concentraciones casi diarias ante el domicilio de Pablo Iglesias e Irene Montero, ubicada en la localidad madrileña de Galapagar.
Durante estas congregaciones en la vivienda de la pareja, dónde residían también con sus tres hijos pequeños, Frontera uno de los rostros más visibles. Según lo denunciado, el ultra utilizaba altavoces a la puerta del domicilio para poner música a un alto volumen, retransmitía en directo las distintas caceroladas que se daban entre los participantes e investigaba nuevas vías de acceso, sorteando la seguridad, para acercarse lo máximo posible a la vivienda del ex vicepresidente del Gobierno y la ex ministra de Igualdad. Durante aquellos meses, un juzgado llegó a establecer una orden de alejamiento a Frontera.
También estuvo presente en las protestas de Ferraz
Miguel Frontera también protagonizó varios momentos mediáticos durante las manifestaciones frente a la sede central del PSOE en Ferraz, durante el pasado mes de noviembre. El ultra acudió a las concentraciones contra el Gobierno de Pedro Sánchez con una réplica del conocido escudo del superhéroe Capitán América, pero con los colores de la bandera de España, y se le pudo ver junto otros rostros ultras como Alvise Pérez y el líder de Desokupa, Daniel Esteve. Finalmente, fue denunciado por varios manifestantes de ser un policía infiltrado.
