Las elecciones generales del 23 de julio han supuesto un fuerte varapalo para dos corrientes políticas que han gozado de buena salud parlamentaria durante la última legislatura. Son los casos del independentismo catalán y de la España Vaciada, que han visto cómo estos comicios han mermado enormemente sus aspiraciones de supervivencia. 

El independentismo ha perdido más de 700.000 votos con respecto a las elecciones de noviembre de 2019. Hace cuatro años, Esquerra Republicana de Catalunya, Junts y la CUP sumaban un total de 1.652.055 electores. Ayer, sumaron unos 952.000. Especialmente sangrante es el retroceso de ERC, quienes han perdido casi la mitad de sus votantes y han pasado de ostentar 13 parlamentarios a tan solo 7, y el de la CUP, que desaparece del Congreso de los Diputados. Junts ha sido la formación secesionista que más ha aguantado este terremoto.

Consecuencia y síntoma de esta caída del nacionalismo periférico es el hecho de que tanto el PP como Sumar han cosechado más votos que cualquiera de las formaciones soberanistas, con la candidatura de Yolanda Díaz, de hecho, siendo la segunda fuerza en Cataluña, por detrás de un PSC que ha cimentado una sólida mayoría. Vox, por su parte, también ha crecido en Cataluña, pero no lo suficiente para trasladarlo en un mayor número de diputados.

Malos han sido también los resultados electorales de la plataforma España Vaciada, al no haber conseguido escaño en ninguna de las dos cámaras, motivo por el que Teruel Existe se verá obligado a abandonar el único asiento que ostentaba tras haber perdido más de 8.000 votos en su propia provincia. Por otra parte, la formación hermana de la turolense, Soria Ya!, tampoco ha conseguido el apoyo suficiente para obtener representación en el Parlamento. Con respecto a la Cámara Alta, la coalición Existe ha perdido los dos senadores que consiguió por Teruel en 2019, de los cuales uno ha quedado en manos de los 'populares' y otro se lo han sumado los socialistas.

Teruel Existe diagnostica su eliminación

Teruel Existe ha lamentado no haber revalidado la representación institucional con la que, en su visión, "hizo historia" la pasada legislatura y ha colgado su pérdida de votos al "clima de confrontación" que ha imperado durante la campaña electoral. En este sentido, también han achacado al panorama político actual que se haya relegado a un segundo plano la atención de los problemas que conciernen a la España rural.

"La polarización, que no es un bien para ninguna democracia y que ha caracterizado esta campaña electoral y estas elecciones, se ha impuesto", ha elucubrado el 'cabeza de lista' de Teruel Existe al Congreso, Diego Loras, en declaraciones desde la sede del partido.

No obstante, Teruel Existe ha sostenido que "por el bien" de la democracia, su partido volverá al Congreso y el Senado porque es un proyecto que "miles de turolenses han aprecio y valorado como positivo para Teruel. También ha reivindicado el poder institucional de la coalición Existe en las Cortes de Aragón y en la diputación de Teruel, así como con sus 111 concejales en distintos ayuntamientos.

Loras ha advertido que durante los próximos años su formación estará "vigilante" con las promesas electorales que el resto de partidos han realizado durante la campaña sobre la provincia de Teruel y la España Vaciada. También ha asegurado que exigirán que sigan adelante "todos los proyectos y medidas" impulsadas los últimos cuatro años en ambas cámaras.

La España Vaciada y el independentismo en el 28M

De igual manera que lo han sido las elecciones generales, el 28 de mayo también supuso una caída significativa para el independentismo catalán. Los tres principales partidos nacionalistas, ERC, JxCAT y la CUP, perdieron en conjunto más de 350.000 electores en los municipios catalanes. En concreto, la sangría más grande la sufrió ERC, que pasó de 822.107 votos en 2019 a solo 520.360, un brutal descenso de más de 300.000 apoyos que le acarreó la pérdida de las ciudades de Tarragona y Lleida, entre otras, así como la Diputación de Lleida.

La España Vaciada, por su parte, solo logró representación en dos de las siete capitales de provincia en las que se presentó y no consiguió ser llave en ningún ayuntamiento o parlamento autonómico.

En Aragón, la coalición Existe obtuvo tres diputados, logrando representación en la región por primera vez en su historia, pero su papel cayó en saco roto ya que el PP (28 diputados) y Vox (7 diputados) ya suman mayoría absoluta entre ellos.

Teruel Existe quedó en segundo lugar en su ciudad con cinco concejales, por encima del PSOE, que obtuvo tres, pero tampoco tuvieron un papel relevante porque la alcaldía cayó en manos del PP, que cosechó mayoría absoluta con once ediles. En Logroño, la España Vaciada obtuvo un concejal, pero ahí los 'populares' también alcanzaron la mayoría absoluta, por lo que volvieron a ver frustradas sus aspiraciones.

Así las cosas, el nacionalismo catalán y los territorios de la España despoblada han visto cómo el panorama político actual ha desplazado sus objetivos a un segundo plano en las prioridades de los españoles. Quizá, con un escenario en el que no existiera tal urgencia de freno al bloque rival, estos partidos hubieran podido mantener el tipo, pero con la polarización imperante, lo que se ha producido ha sido una sangría en su contra que ha puesto de manifiesto la jerarquía en las prioridades del ciudadano español, tanto del progresista como del conservador.