Dos agentes de policía salen de la sede del PP, en la madrileña calle Génova, tras concluir el trabajo de la comisión judicial enviada por el juez Pablo Ruz, tras 14 horas de búsqueda. EFE



La Agencia Tributaria ha enviado al juez Pablo Ruz, que investiga la financiación ilegal del PP por el caso Bárcenas, un informe en el que asegura que las donaciones ilegales realizadas a los partidos están exentas de pagar impuestos. Una conclusión que exculparía al Partido Popular del delito fiscal que investiga el juez.

La teoría de Ruz, plasmada en varios autos, es que "las cantidades donadas en exceso de los límites legales quedarían sujetas a tributación por el impuesto de sociedades, ostentando aquellos ingresos el tratamiento de rentas sujetas a tributación”. Esta posición supondría que el PP habría cometido un delito fiscal por no pagar la cuota del Impuesto de Sociedades en 2008, cuando la formación llegó a ingresar 1.055.000 euros, según recogen los papeles de Bárcenas.

Informes contradictorios
La Agencia Tributaria remitió al magistrado dos informes contradictorios sobre esta cuestión y finalmente la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF), dependiente de Hacienda, ha enviado su respuesta el pasado 17 de octubre en un informe al que ha tenido acceso ELPLURAL.COM. La ONIF concluye que la Ley de Financiación de Partidos Políticos señala que las donaciones están exentas de tributar, sin entrar en detalles si esa exención también afecta a los donativos ilegales, porque haya superado los 60.000 euros anuales o porque los donantes sean contratistas de la Administración Pública.

No se exige que sean legales
"En la definición de las donaciones exentas de pagar impuestos no se exige que se hayan obtenido de acuerdo a la Ley", asegura la Agencia Tributaria. Sin embargo, aclara que esto no quiere decir que todas las donaciones estén amparadas por la exención, pero añade que las formaciones no deben pagar impuestos si los donativos se usar para "financiar las actividades que constituyan el objeto o finalidad específica del partido político".

Destinados a la actividad
Según la ONIF, el PP sólo tendría que pagar impuestos si no hubiera destinado las donaciones ilegales a la actividad normal de la formación. "La finalidad de la norma fue que solo quedaran fuera de la exención las donaciones irrgulares que no se afectaran a la finalidad política, esto es, que se destinarán a otros fines -lícitos o no- desarrollados por el partido". Y concluye que "la realización de gastos electorales, de otros gastos de funcionamiento de carácter laboral -aún cuando sean de retribución a la alta dirección- e incluso la realización de inversiones en la sede de la entidad, se considera afectación amparada por la exención".

Sobresueldos y reformas
Tal y como señalan los papeles de Bárcenas, que reflejan los asientos contables de la caja B del PP, la formación dedicó parte de los donativos a repartir sobresueldos entre la cúpula del partido y a renovar su sede nacional en la calle Génova.