La elección de Ramón Tamames por parte de Vox para liderar la moción de censura contra el Gobierno de Pedro Sánchez, que tendrá lugar el martes y miércoles de la próxima semana, no solo ha puesto patas arriba, incluso, a parte de la propia formación ultra -un sector cada vez mayor-, sino que también ha obligado al Congreso de los Diputados a trabajar a contrarreloj con el objetivo de prepararse para el discurso del veterano economista.

De esta manera, una de las grandes incógnitas de la intervención de Tamames era precisamente desde dónde intervendría este. Un enigma que este jueves se resolvía, después de que Tamames, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, y el portavoz de Vox en la Cámara Baja, Iván Espinosa de los Monteros, acordaran que el candidato de los ultras hablará desde el escaño que tiene asignado en el hemiciclo el líder del partido, Santiago Abascal.

Según han explicado fuentes parlamentarias, durante la charla que mantuvieron el jueves Tamames, Batet y Espinosa de los Monteros, se optó finalmente por esta solución para evitar que el candidato ultra tuviera que estar durante todo el debate subiendo y bajando los empinados escalones que llevan a la tribuna de oradores del Salón de Plenos cada vez que le tocara intervenir.

Se sentará justo encima del banco azul

En concreto, Tamames se sentará el martes y el miércoles de la próxima semana en la primera fila de escaños del Congreso, justo encima del banco azul, reservado para los miembros del Ejecutivo. Se trata de una ubicación desde la que podrá debatir cara a cara con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al que Vox aspira desalojar de la Moncloa, aunque la viabilidad de la moción de censura parece poco menos que una utopía, dada la falta de apoyos.

Así, el economista tendrá justo debajo a la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, y a su izquierda, separado por las escaleras que dan acceso a los escaños, estará el portavoz del PNV, Aitor Esteban. A su espalda se sentará el grueso de los diputados de Vox y también al grupo parlamentario de Ciudadanos.

Se barajó la posibilidad de que se le habilitara un espacio en el centro del Congreso

En la conversación que Batet mantuvo con el economista el pasado lunes, ofreció a Tamames la posibilidad de que se le habilitara un espacio en el centro del hemiciclo, habitualmente reservado a los servicios de taquigrafía, para evitar las escaleras, una opción que el candidato vio inicialmente con buenos ojos.

Sin embargo, finalmente ha preferido situarse en el escaño de Abascal, que previsiblemente estará a su lado salvo cambios de última hora. Tamames, que tiene 89 años y utiliza bastón para caminar, elegirá si realiza sus intervenciones de pie o sentado -le han preparado el micrófono específicamente para hacer más fácil la tarea-, o va combinando ambas posturas.

No obstante, según ha podido saber ElPlural.com, pese al delicado estado de salud de Tamames, desde Vox no descartan que a lo largo del debate el candidato de los ultras se levante e improvise.

Cuarta moción de censura en siete años

Con este telón de fondo, cabe retrotraerse a los principios de la democracia que, con la que se celebrará la semana que viene, serán seis las mociones de censura que se han celebrado desde 1978. No obstante, resulta más que notorio que cuatro de ellas se hayan celebrado en menos de una década, concretamente, en siete años.

Grosso modo, los únicos presidentes del Ejecutivo central que no han pasado por este intento de censura por parte de la oposición fueron Leopoldo Calvo Sotelo, José María Aznar y José Luis Rodríguez. Por ende, Adolfo Suárez, Felipe González, Mariano Rajoy y Pedro Sánchez sí se han sometido a este proceso, el último de ellos, con la que está a punto de celebrarse, por partida doble.

Los próximos 21 y 22 de marzo, la dinámica será sencilla: Abascal actuará como ‘telonero’ para introducir las razones por las que se debe poner fin al mandato de Sánchez antes de que se celebren las elecciones generales; a continuación, será Tamames quien defienda su candidatura en la tribuna, pudiendo exponer su ideario ante la Cámara.

Dinámica de la sesión plenaria

Los próximos 21 y 22 de marzo, la dinámica será sencilla: Abascal actuará como ‘telonero’ para introducir las razones por las que se debe poner fin al mandato de Sánchez antes de que se celebren las elecciones generales; a continuación, será Tamames quien defienda su candidatura en la tribuna, pudiendo exponer su ideario ante la Cámara Baja pese a que la intención última de Abascal sea la convocatoria inmediata en las urnas.

El exdirigente del Partido Comunista Español (PCE) ya ha dejado claro que no seguirá la línea de discurso de Vox y, en reiteradas entrevistas durante las últimas semanas, ha ido marcando sus diferencias con la formación de ultraderecha. “Es una oportunidad que se presenta una vez en la vida”, defendió. Y es que, tal y como apunta el periódico El País, Tamames no pronostica horizonte alguno en el que pueda erigirse como jefe del Ejecutivo central, solo dará voz a las propuestas que tiene en mente para la población.