En su tradicional discurso de Nochebuena, el rey Felipe VI apeló este martes 24 de diciembre a la serenidad y al consenso como respuestas necesarias ante la intensa polarización que domina el panorama político en España. Con un mensaje cargado de referencias a la solidaridad y al bien común, el monarca ha centrado sus palabras en los retos nacionales e internacionales, subrayando la necesidad de un diálogo constructivo y de medidas conjuntas para superar los desafíos actuales.

Reconocimiento a la solidaridad tras la tragedia de la DANA

El discurso, tal y como se esperaba, ha comenzado con un emotivo recordatorio a las víctimas de la DANA que azotó el sureste del país hace dos meses, dejando tras de sí una estela de destrucción. Felipe VI ha destacado la respuesta solidaria de los ciudadanos y los cuerpos de emergencia, calificándola como una expresión ejemplar de humanidad frente a la adversidad. “Vecinos, voluntarios y servidores públicos han demostrado que la solidaridad pura y concreta sigue siendo una fuerza abrumadora en nuestra sociedad”, ha afirmado el monarca.

Sin embargo, también ha reconocido las demandas de mayor eficacia y coordinación entre las administraciones en la gestión de la emergencia. En este sentido, ha subrayado que los sentimientos de frustración y dolor compartidos por los afectados deben motivar una reflexión profunda para fortalecer la respuesta institucional en el futuro.

El "consenso" como eje del bien común

Así, uno de los pilares del mensaje ha sido la importancia de preservar el bien común a través del consenso en torno a lo esencial. Felipe VI ha instado a las instituciones y administraciones públicas a trabajar conjuntamente y a evitar que la diversidad de opiniones en democracia se convierta en un obstáculo para la existencia de un espacio compartido. “El acuerdo en lo esencial no debe ser solo un resultado, sino una práctica constante que guíe la esfera de lo público”, ha destacado.

El monarca también ha expresado su preocupación por el “clima” del debate público en España, que ha descrito como frecuentemente crispado y poco propicio para abordar los desafíos colectivos. Hizo un llamamiento a que la “atronadora contienda política” no silencie las demandas ciudadanas de serenidad y acción efectiva.

Desafíos urgentes: inmigración y acceso a la vivienda

Entre los temas abordados, Felipe VI ha dedicado un apartado a la inmigración, calificándola como un "fenómeno complejo" que requiere esfuerzos conjuntos de integración y firmeza contra las mafias que trafican con personas. Así, ha destacado la necesidad de coordinar políticas con los socios europeos y con los países de origen y tránsito, recordando que la gestión de este fenómeno dirá mucho sobre la calidad de la democracia española: "La manera en la que seamos capaces de abordar la inmigración –que también precisa de una buena coordinación con nuestros socios europeos, así como con los países de origen y tránsito– dirá mucho en el futuro sobre nuestros principios y la calidad de nuestra democracia".

Otro asunto que ha calificado de prioritario fue la dificultad para acceder a la vivienda, en especial para los jóvenes. El monarca ha pedido un diálogo entre todos los actores implicados para buscar soluciones que garanticen condiciones asequibles y faciliten proyectos de vida. “La vivienda es la base de la seguridad y el bienestar”, ha recordando, destacando su papel fundamental en la construcción de un futuro esperanzador.

El escenario internacional y la defensa de la democracia

El discurso también ha abordado el complejo panorama internacional, marcado por cuestionamientos al derecho internacional, la universalidad de los derechos humanos y la validez de la democracia como sistema de gobierno. Ante estos desafíos, Felipe VI ha reafirmado el compromiso de España y la Unión Europea con la defensa de los valores democráticos y los derechos humanos, así como con la promoción de soluciones multilaterales a problemas globales como el cambio climático y la transición energética.

“En un mundo necesitado de actores fuertes y cohesionados, pero sobre todo de conductas inspiradas en principios y valores, y ahí Europa sigue siendo nuestra referencia más valiosa", ha enfatizado el monarca, señalando la importancia de preservar los logros de bienestar social y democracia que caracterizan al continente.

La Constitución como referencia de convivencia

Asimismo, Felipe VI ha dedicado un espacio especial a la Constitución de 1978, definiéndola como el “gran pacto de convivencia” que sostiene la democracia española. Subrayó la importancia de mantener vivo su espíritu de consenso para fortalecer las instituciones y recuperar la confianza ciudadana.

En un mensaje que pareció aludir a las tensiones políticas actuales, el monarca ha insistido en que el diálogo debe ser la herramienta principal para proteger el pacto de convivencia. “No podemos permitir que la discordia se convierta en un constante ruido de fondo que impida escuchar el auténtico pulso de la ciudadanía”, ha subrayado.

Un mensaje de esperanza para el futuro

En la parte final de su discurso, Felipe VI ha mostrado optimismo sobre el futuro de España, destacando el potencial de la juventud como motor de cambio y superación. Recordó los logros recientes en el ámbito deportivo, científico y social, y valoró el esfuerzo de las nuevas generaciones frente a los desafíos, como el desempleo juvenil.

El monarca también ha reconocido las dificultades que persisten, como la pobreza y la exclusión social, pero ha hecho un llamamiento a la esperanza y al trabajo conjunto para construir un país mejor. En este sentido, cerró su intervención volviendo a los afectados por la DANA, pidiendo que la solidaridad y la acción coordinada sean el camino hacia la recuperación y el fortalecimiento del sentido de comunidad.

“Que la memoria del camino recorrido, la confianza en el presente y la esperanza en el futuro sean parte ineludible de nuestro bien común”, ha concluido Felipe VI, deseando a los españoles una Feliz Navidad junto a la reina Letizia y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía.

boton whatsapp 600