El líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, ha acudido al aquelarre montado por el presidente de FAES (Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales), José María Aznar, para despedir una campus cuya piedra angular ha sido el ataque al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez. “Incompetente” y “falto de ideas” han sido los calificativos elegidos este viernes por el político gallego, que se ha mimetizado a la perfección con el ambiente del acto del think tank del Partido Popular (PP).
Un día antes, Aznar defendía el genocidio que Israel está perpetrando en Palestina desde la misma tribuna, asegurando que “si Israel pierde lo que está haciendo”, Occidente estaría “al borde de la derrota total”. Un apoyo directo al exterminio impulsado por Benjamín Netanyahu. Sin embargo, Feijóo considera que quien está avivando el conflicto es Sánchez.
"Quien carece de ideas, quien está hasta el cuello de corrupción, quien ya se sabe sin el aval de la mayoría de la sociedad, necesita conflictividad y necesita cronificarla. El Gobierno a la desesperada ya no tiene más a lo que agarrarse para generar la máxima tensión posible", ha valorado el cabecilla de la oposición, subrayando que Sánchez busca ese "conflicto sin límites porque sabe que España apuesta por el cambio". “Gobierna sólo para un lado del muro, y cada día contra más gente. No es normal que llame al boicot de un evento deportivo internacional que se celebra en su país", ha proseguido.
Feijóo se ha mostrado muy preocupado por los eventos deportivos, no tanto por los niños asesinados en Gaza, y ha considerado que no participar en ellos es una violencia inadmisible. “La violencia es el último recurso de un incompetente", ha trasladado. "Hay decadencia en las instituciones y en la convivencia, porque se nos divide por todo”, ha continuado. Para hacer frente a esto, el conservador considera que “España necesita un cambio” liderado por él mismo. “Lo necesita por sí misma, pero también para jugar un papel en el mundo", ha zanjado.
Aznar, en su línea
Antes de que hablase Feijóo ha tenido lugar el turno del jinete del apocalipsis que detectó armas de destrucción masiva en Iraq y dilucidó que el 11M había sido ETA. "Ni lucidez ni coraje adornan a los dirigentes del Gobierno de España", ha espetado, asegurando que "estamos liderados por una ineptocracia corrupta" que es "fuente de desorden". "España hoy no funciona", ha proseguido sin aportar datos, muestra "una total irrelevancia" en foros internacionales porque "el Gobierno ha dimitido de su responsabilidad sin renunciar a su poder".
"Mucho cuidado con un poder dispuesto a ser rehén voluntario de la violencia”, ha introducido la clásica llamada al miedo que posteriormente ha desarrollado. "Se vislumbra un sanchismo terminal y por eso mismo, peligroso, muy peligroso. Le dará exactamente igual explotar en beneficio propio la violencia que pueda venir", ha dejado caer, una vez más sin esclarecer a que se refiere, estilo que siempre le ha caracterizado.