Los debates en el Congreso de los Diputados han cambiado. A los pinganillos y los intérpretes hay que sumar nuevos momentos de dardos ácidos que protagonizan las sesiones. Uno de los más duros, tirando de ironía, ha sido el diputado catalán Marc Lamuà, del PSC, quien al subir a la tribuna y disponerse a ejercer su derecho a la palabra ha criticado de forma muy aplaudida tanto a Vox como al diputado del PP Borja Sémper, que, este jueves, ha abandonado de forma definitiva el euskera tras las críticas de su propio partido y los comunicadores de la derecha mediática.

"Señores de Vox, ya son más de las 9:30 y estaré hablando en catalán por un tiempo, así que podrían aprovechar para dirigirse a su lugar preferido en el Congreso. El bar", ha arrancado. Para seguir, y ya mirando a los ojos a Sémper, le ha reprochado su cambio repentino: "Hemos notado la ausencia de su euskera, su plurilingüismo solo duró una sesión; esperemos que regrese pronto".

Un toque ácido que ha venido justo después de la intervención de Sémper, donde, además de reivindicar que hay muchas formas de sentirse españoles, ha arremetido contra el Gobierno defendiendo la enmienda presentada por el PP para tumbar el uso de las lenguas cooficiales en el Congreso de los Diputados.

Los motivos del comentario

Los motivos de este comentario no son fruto de la casualidad. A Vox le gusta definirse como "la España que madruga", pero, sin emvargo, siempre se ha especulado con el poco ahínco que tienen los diputados de extrema derecha en echar horas extra en el Congreso de los Diputados. 

Su marcha temprana del Hemiciclo, de hecho, fue motivo de burla el pasado martes durante el pleno en el que se aprobó el inicio de la tramitación de las lenguas cooficiales en el Congreso. 

Vox, en señal de protesta, decidió marcharse del pleno para mostrar su repulsa al uso del catalán, euskera, galego, aragonés y asturleonés. Además, lo hizo de forma ostentosa, lanzando los dispositvos de traducción sobre el escaño que habitualmente ocupa el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ausente durante ese pleno por motivos de agenda en EEUU. 

¿Qué dice Vox? 

Este mismo jueves, en el debate de las enmiendas al cambio reglamentario, ha sido Pepa Millán, portavoz de Vox, quien ha tomado la palabra desde la tribuna de oradores. La dirigente ultra ha llegado a reírse de Jorge Pueyo, diputado de la Chunta Aragonesista, al decir que sus quejas por ser humillado de pequeño no eran más que causas de "ofendidito". 

“Van de la mano de un diputado nacido en los 90, como yo, que se quejaba amargamente de no poder hablar en aragonés. Se cree usted que estamos aquí para aliviar que un profesor le tuviese manía. Tranquilo, luego le damos un abrazo”, ha indicado.