La polémica generada entre el Gobierno regional de Isabel Díaz Ayuso y la portavoz de Vox en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, ha dado de qué hablar en la esfera pública.
Ante la reapertura de los espacios dedicados al deporte en la Comunidad de Madrid por el riesgo a los contagios de coronavirus, recientemente el vicepresidente del gobierno autonómico, Ignacio Aguado, visitaba una de las instalaciones de Crossfit, interesándose por la situación de los trabajadores del sector.
En este sentido, Rocío Monasterio reprochaba a las filas populares la defensa del deporte y los spa como "actividades esenciales", invitándole así a acudir a las colas del hambre. El propio Aguado replicaba en su cuenta de Twitter las palabas de la líder regional de Vox: "¿Qué tiene que ver el CrossFit con el Spa?", se preguntaba, argumentando a continuación que el deporte "es salud".
Bajen ustedes a la realidad, dejen de dar prioridad a problemas de urbanitas ricos, aumenten las ayudas directas a empresas hosteleras, hoteleras y autónomos. Muchos de sus trabajadores están en las colas del hambre y les da igual sus preocupaciones por el cross-fit y los spa. https://t.co/XQiPP57Ko4
— Rocio Monasterio (@monasterioR) February 18, 2021
Poco después, Monasterio volvía a responder a Aguado tildando este asunto como "problemas de urbanitas ricos", invitando así a que las ayudas económicas fuesen destinadas para la hostelería y los autónomos.
La contundente respuesta de los representantes del deporte
La representante de Crossfit en España, Nat Díez, que cuenta con más de 7.000 seguidores en Instagram, le reprochaba a Monasterio su ensañamiento con su sector. "CrossFit tiene ni más ni menos que 514 centros en España, hablamos de 514 pequeños empresarios que mueven cientos y miles de clientes velando por su salud", argumentaba.



