El Senado de la ciudad-estado de Berlín decidió el pasado miércoles apagar la iluminación nocturna de más de 200 monumentos de la capital alemana con el objetivo de ahorrar electricidad por las consecuencias derivadas de la guerra de Ucrania.
Desde la noche de esa jornada, quedaron a oscuras monumentos emblemñaticos como la puerta de Brandenburgo, la Catedral de Berlín, la Iglesia de Santa María y el Viejo Palacio, entre muchos otras construcciones.
Berlin dims monument lighting to save energy amid gas crisis 🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣🤣 pic.twitter.com/iE5M5Hjikm
— multipolar world order !!🇳🇬🇷🇺🇳🇬🇷🇺 (@TobiAyodele) July 30, 2022
"En el contexto de la guerra contra Ucrania y de las amenazas energéticas de Rusia es importante que actuemos de forma muy cuidadosa con nuestra energía," explicó Bettina Jarasch, senadora de Medioambiente de la ciudad.
Jarasch detalló que el consumo total de la iluminación nocturna de todos los monumentos en Berlín gasta alrededor de 200.000 kilovatios por año, lo que corresponde a un gasto de 40.000 euros. Y es solo una de las muchas medidas que se están tomando enel país germano con el objetivo de dejar de lado la dependencia de energía procedente de Rusia.
Choca con las medidas de Ayuso
Estas iniciativas, sin embargo, no concuerdan con las que nos encontramos en la capital española, donde la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, anunció el lunes que su gobierno no tiene pensado apagar la luz de los edificios públicos ni de los escaparates del comercio exterior para ahorrar porque, a su juicio, generaría "inseguridad" y espantaría "el turismo y el consumo".
Ayuso hizo estas declaraciones después de que el Gobierno anunciara que una de las medidas para el ahorro energético sería obligar a apagar las luces de escaparates y edificios públicos que estén desocupados a partir de las 22.00 horas.
La presidenta regional avanzó que en la región no se aplicará. “Madrid no se apaga”, recalcó, añadiendo que “provoca oscuridad, pobreza y tristeza". Al mismo tiempo lanzó una pregunta al Ejecutivo: ¿Qué ahorro se va a aplicar a sí mismo?".
Lo que sí dejó claro Isabel Díaz Ayuso es que ella no piensa contribuir a los esfuerzos que están realizando en este sentido desde otros puntos de Europa.
